En la exposición de motivos, la integrante del Grupo Parlamentario del PRI fundamentó que es imprescindible comprender que estos materiales educativos constituyen un componente fundamental de la educación básica en México. Aseguró que son herramientas pedagógicas que construyen el pensamiento crítico en el aprendizaje de los infantes.
En ese sentido, precisó que recientemente diversos medios de comunicación y especialistas educativos han alertado sobre diversas preocupaciones respecto al diseño de los contenidos de los libros de texto. Indicó que esto se focalizó con el ingreso de un ideólogo y ex funcionario venezolano a la Subdirección de Materiales Educativos de la SEP.
Además, puntualizó, la alerta tomó relevancia al ver en la conformación del organigrama de la SEP, que personas extranjeras se encuentran adscritas a la Dirección de Desarrollo e Innovación de Materiales Educativos, hecho que genera especulación sobre la neutralidad de los textos.
La también presidenta de la Comisión de Derechos de la Niñez y Adolescencia destacó que investigadores y académicos han comentando que no se deberían tener a pensadores ni de derecha ni de izquierda, ni neomarxistas ni neoliberales redactando los libros escolares, por el contrario, subrayaron, deben ser psicólogos del aprendizaje y expertos en pedagogía.
Por ello, advirtió, los ejemplares educativos pueden ser tomados como medio de comunicación que tiende a uniformar el discurso que transmite un conteniendo con carga ideológica, política, social y cultural, que influye en el reconocimiento de legitimidad en la sociedad.
La representante del tricolor por el Estado de México recordó que el compromiso con los menores es que se les proporcionen libros de texto gratuitos especializados acorde a su etapa o grado, con los elementos que procuren el desarrollo de su personalidad, aptitudes y capacidades.