Informe anual de UNICEF México: garantizar oportunidades educativas inclusivas, equitativas y de calidad es central para el presente y el futuro de México

UNICEF, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, presentó su informe anual sobre la situación de la niñez y la adolescencia en México, así como la labor que desempeña en apoyo al cumplimiento de los derechos de este importante sector poblacional.

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Durante el evento, que se llevó a cabo en la Biblioteca Vasconcelos de la Ciudad de México y que contó con la presencia de actores clave del gobierno, sociedad civil, sector empresarial y organismos internacionales, se resaltó la importancia de centrar los esfuerzos nacionales en la garantía del derecho a la educación de niñas, niños y adolescentes por ser puerta de acceso a otros derechos, tales como el derecho a la salud y a una nutrición suficiente y de calidad, a la protección social y a una vida libre de violencia.

"La educación es un derecho de cada niña, niño y adolescente que le da conocimientos y herramientas para el ejercicio de otros derechos. El acceso educativo se torna central especialmente para aquellas niñas, niños y adolescentes que viven en condiciones de mayor vulnerabilidad, pues brindarles un mayor acceso a oportunidades educativas equitativas, inclusivas y de calidad les permite obtener mejores resultados de aprendizaje y el desarrollo de habilidades fundamentales para la vida; imprescindible para el desarrollo pleno de las niñas y los niños, pero también del país", señaló Fernando Carrera Castro, Representante de UNICEF en el país.

El informe, que resume los avances y retos en materia de derechos de la niñez y adolescencia en México, así como las principales intervenciones de la organización en materia de salud, nutrición, educación, política social y protección, muestra que, en 2022, los hogares con niñas, niños y adolescentes presentaron una situación con múltiples desafíos que comprometen su pleno desarrollo, así como el de la sociedad en su conjunto:

4 de cada 10 niñas, niños y adolescentes tienen obesidad y sobrepeso. 5 de cada 10 acostumbran a comer botanas, postres y dulces como parte de su dieta diaria (ENSANUT 2021 sobre COVID-19);

5 de cada 10 niñas, niños y adolescentes sufrieron violencia en el hogar (INEGI, 2019 y ENSANUT 2018-2019). 1 de cada 2 adolescentes vivieron actos violentos como golpes, patadas o puñetazos (ENSANUT 2021 sobre COVID-19); ese año, las autoridades migratorias de México detectaron a 70 mil niñas, niños y adolescentes migrantes, 8 de cada 10 viajaban con sus familias (Unidad de Política Migratoria, Boletín Estadístico de enero 2023); 28.9 millones de niñas, niños y adolescentes regresaron a clases presenciales en el ciclo escolar 2021-2022, la pandemia retrasó 2 años su aprendizaje (Banco Mundial, 2021);

Dadas las importantes implicaciones de esta situación, durante el 2022 UNICEF enfocó sus esfuerzos en apoyar los esfuerzos de las autoridades mexicanas vinculadas a, entre otros: diseñar y ampliar programas clave de protección social, así como impulsar una mejor inversión pública hacia programas y servicios prioritarios para niñas, niños y adolescentes;desarrollar iniciativas para reducir todas las formas de mala nutrición, a través del fortalecimiento de los servicios nutricionales en el sistema de salud, la promoción de entornos más saludables y el mejoramiento de los comportamientos y hábitos alimenticios tanto de padres, madres y personas cuidadoras, como de niñas, niños y adolescentes; impulsar acciones enfocadas en la recuperación de aprendizajes perdidos por el cierre de escuelas a consecuencia de la pandemia por COVID; fortalecer los sistemas nacionales de protección, los servicios de atención para niñas, niños y adolescentes y el desarrollo de un sistema nacional de información sobre la protección de la infancia, así como el desarrollo de mecanismos de prevención y atención a la violencia; armonizar la legislación nacional sobre la prohibición de los castigos corporales y la tipificación de la violencia sexual como delito en todo el territorio nacional; diseñar y poner en marcha un modelo nacional de atención a niñez y adolescencia migrantes, incluyendo el desarrollo de protocolos binacionales y la promoción de programas de cuidados alternativos en el país.

"En UNICEF tenemos certeza de que es posible construir un México distinto, un México en el que ninguna niña, niño y adolescente viva en condiciones de pobreza, en el que ninguno tenga que huir de la violencia o sufra abandono, abuso o explotación. Un país en el que todas y todos tengan acceso a una educación incluyente, equitativa y de calidad. Lograrlo es posible, México tiene los recursos para hacerlo", agregó Fernando Carrea, Representante de UNICEF en México. "Este es un sueño que compartimos desde UNICEF con todos nuestros aliados de gobierno, empresas y sociedad civil. Hablar del futuro del país es hablar de la niñez y la adolescencia, así que gracias, porque sin ustedes nuestro trabajo no sería posible", concluyó.