Carlos Blackaller Ayala, presidente de la organización, afirmó que los productores enfrentan un escenario de competencia desleal con la importación de jarabe de maíz de alta fructuosa al país en condiciones de diferenciación de precios.
También dijo que se están viendo precios bajos del azúcar en el mercado nacional “que tienen que ver de manera directa con los bajos precios mundiales en la región del Tratado de Libre Comercio”.
Al reunirse con la Comisión Especial de Análisis de la Agroindustria Azucarera, pidió a los diputados impulsar la aplicación de un programa emergente e integral que comprenda no sólo la zafra 2012- 2013, sino que abarque hasta el año 2018.
Consideró que la industria debe recibir mayor importancia en la asignación del Presupuesto de Egresos de la Federación para que los apoyos no se otorguen sólo como “parches” o paliativos.
Dijo que se deben implementar acciones inmediatas para evitar que se produzca una cartera vencida en la industria conformada por 170 mil cañeros ubicados en 15 estados y que genera 2.5 millones de empleos directos e indirectos.
Blackaller Ayala, señaló que durante este ciclo se registró una zafra inédita de seis millones 680 mil toneladas de producción, lo cual traerá consigo una sobreoferta nacional.
Señaló que por lo anterior será necesario desplazar 900 mil toneladas a mercados alternos en donde los precios son aún más bajos y pidió que el gobierno federal otorgue insumos suficientes y vigile que los recursos lleguen a los destinatarios adecuados.
El presidente de la Comisión Especial, diputado Tomás López Landero (PRI), se comprometió a convocar lo antes posible a las autoridades federales, “principalmente al titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación”, Enrique Martínez y Martínez.
Afirmó que pedirán de inmediato la intervención del secretario para “solucionar el conflicto de los involucrados en la industria azucarera”.
La diputada Yazmín de los Ángeles Copete Zapot (PRD) pidió a todos los sectores “asumir responsabilidades” y trabajar en contra de la “indolencia criminal” por parte del sector público al no atender los problemas del campo.
Consideró que hace falta que se otorgue un subsidio por tres mil 500 millones de pesos para hacer frente a la baja en el precio de la tonelada de azúcar y afirmó que debe detenerse la escalada de precios a alimentos en detrimento de los sectores productivos y de la población en general.
Productores cañeros de San Luis Potosí, Morelos, Michoacán, Veracruz, Nayarit, entre otros, asistieron a la reunión y coincidieron en la necesidad de que este tipo de encuentros no sean sólo “un muro de lamentos” y se elabore una “red” de acuerdos y acciones que redunden en mejoras al sector.