Durante una reunión con representantes de la Pastoral de Movilidad Humana, en la que estuvo presente el sacerdote Alejandro Solalinde Guerra, Blake Mora destacó la importancia de contar con una nueva Ley Migratoria.
Ello, dado que la actual no corresponde con el fenómeno migratorio regional y con el fin de fortalecer las labores del Instituto Nacional de Migración (INM).
En un comunicado, la Segob destacó que el responsable de la política interna del país y el sacerdote Solalinde coincidieron en mantener una comunicación constante en favor de la protección de las personas y las rutas de los migrantes, así como el respeto irrestricto a los derechos humanos.
Además, en el encuentro que se llevó a cabo en el marco de las acciones de acercamiento institucional y seguimiento a los temas de seguridad de los migrantes, se informó del proceso de depuración que se realizada desde el pasado mes de septiembre al interior del INM.
Luego de la aplicación de exámenes de control de confianza a los más de cinco mil funcionarios de la institución, fueron suspendidos y separados del INM 168 agentes al comprobarse la comisión de violaciones a los derechos humanos de los migrantes.
Además, el pasado 20 de abril seis agentes federales de migración al servicio de la delegación regional de Tamaulipas fueron puestos a disposición de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO), para ser investigados por delitos del orden federal, mismos que se encuentran arraigados.
En esta acción participó personal del INM en coadyuvancia con elementos de la Procuraduría General de la República (PGR).
En la reunión en la que estuvo presente el Subsecretario de Población, Migración y Asuntos Religiosos de la Segob, René Martín Zenteno Quintero, también se abordó el Programa Frontera Sur, cuyo objetivo es fortalecer la infraestructura material, tecnológica y el capital humano en aquella región del país.