Como ha destacado Patrice Caine, presidente y CEO de Thales: "la empresa pretende aprovechar sus talentos y sus tecnologías para ayudar a construir un mundo más seguro, más responsable con el medio ambiente y más inclusivo. Las medidas para fortalecer nuestra organización y la gobernanza de la RSC (Responsabilidad Social Corporativa) reflejan nuestra determinación de colocar estas cuestiones en el centro de nuestras prioridades estratégicas".
Entre los objetivos del ESG (Environmental, Social and Governance) firmados por Thales para combatir el calentamiento global y reducir las emisiones de CO², puedo afirmar, con fundamento y orgullo, que, en América Latina, hemos sumado logros en muchos frentes dentro y fuera del país.
Como ejemplo de una operación sustentable, el equipo de la planta de Cuernavaca, Morelos implementó un sistema de gestión de la energía que utilizó el Internet de las Cosas para mejorar la eficiencia y reducir los costos de operación con gran éxito.
Por su parte, la planta de Thales en Pinhais (PR), Brasil, y especializada en la producción de tarjetas bancarias, tarjetas SIM y documentos electrónicos de alta calidad, ha adoptado una serie de acciones de reducción del consumo de energía con resultados concretos relevantes. La fábrica, que se incorporó al mercado libre de energía en 2017, genera el 100 % de su energía a partir de fuentes sustentables.
En el continente latinoamericano, Thales está desplegando la primera estación de radar para el control del tráfico aéreo 100 % sustentable del mundo, en Calama, al norte de Chile. Para que tengamos una idea, la estación se alimentará íntegramente de energía solar de 330 paneles solares. Es una gran satisfacción compartir con nuestros clientes soluciones tecnológicas ecológicas e innovadoras.
Con el objetivo de ampliar la diversidad, nos regimos por el compromiso global de Thales de contar, para 2023, con la presencia de, al menos, tres mujeres en el 75 % de los Comités de Dirección. También para 2023, el objetivo es que el 20 % de los altos cargos sean ocupados por mujeres. En América Latina, el 32 % de los comités de dirección de la región están conformados por mujeres.
Y cuando el propósito es incluir, hay muchas iniciativas transformadoras centradas en la educación y la formación profesional. En Thales Colombia, contamos con una alianza estratégica con la Fundación EducaMÁS, ONG quien promueve la educación en el país. A través de "Programe-se", una escuela de programación, los jóvenes de comunidades vulnerables adquieren conocimientos, desarrollan habilidades y tienen acceso a prácticas y oportunidades laborales.
En Brasil, a través del programa Thales Solidarity, apoyamos a Laboratoria, organización quien opera en cinco países para brindar oportunidades a las mujeres en mercado tech con apoyo y formación profesional desde un bootcamp de seis meses. El proyecto cuenta con más de 2,400 graduados, más de 950 empresas contratantes y altos índices de empleabilidad.
Y, en casa, muchos profesionales de Thales en Brasil son educadores voluntarios en el Programa Formare que, por segundo año, está capacitando a jóvenes en situación de vulnerabilidad social en São Bernardo do Campo (São Paulo). Se trata de un proyecto muy exitoso y de gran atractivo que llevamos a cabo en colaboración con @FundaçãoIochpe.
Hay muchos otros ejemplos que refuerzan nuestros compromisos y nuestra responsabilidad corporativa. Lo estamos haciendo realidad. No es una tarea fácil, pero estamos perseverando y, sobre todo, tenemos un propósito que nos mueve día a día: construir un futuro en el que todos podamos confiar.