La compañía de medios de pagos Mastercard señala a través de un comunicado las especificaciones básicas en cada tarjeta.
Explica que con las tarjetas de débito, los fondos salen directamente de la cuenta corriente o de ahorros del usuario; mientras que en una de crédito, el banco lo proporciona como si se tratara de un préstamo.
Asimismo, con las tarjetas de débito sólo se puede gastar el dinero que se tiene disponible en la cuenta bancaria y con las de crédito el banco otorga una línea de crédito que va acorde a los ingresos que se perciben, y se debe reponer dichos recursos después de utilizarlos.
Indica que una ventaja importante en las tarjetas de crédito es que si se conoce y se aprovecha el ciclo que brindan se pueden planear los pagos y hacerlos más fuertes después de la fecha de corte, para así tener más tiempo para pagar.
La empresa precisa que una tarjeta de crédito ofrece una determinada línea de préstamo, la cual puede ser usada durante un período de tiempo y en varios establecimientos; mientras que una tarjeta de débito no brinda esta línea.
Refiere que las tarjetas de débito no cobran tasas de interés, ya que sólo se puede gastar el saldo disponible; mientras que en las de crédito los intereses representan el costo del financiamiento de los gastos.
La firma indica que los intereses pueden variar de tarjeta a tarjeta y se cobran sólo si no se liquida el total utilizado en la fecha de pago, y en caso de pagar una porción de la deuda, ésta puede aumentar, por lo cual es importante tener presente la fecha de corte y de pago para evitar intereses moratorios.
Mastercard detalla que ambos plásticos tienen distintas comisiones: las tarjetas de débito pueden tener cobros por manejo de cuenta o saldo mínimo y en las de crédito puede o no requerirse el pago de una anualidad por su uso.
Resalta que las tarjetas de crédito ayudan a generar un historial crediticio y si se paga puntualmente puede ser la llave para créditos mayores, como automotrices, hipotecarios o incluso empresariales.
En tanto, las de débito no generan historial crediticio, pero sí son una primera relación bancaria.
Respecto a la seguridad, recuerda que en caso de pérdida o extravío de las tarjetas se pueden reportar y obtener la reposición fácilmente.
Además, en el caso de las de crédito se cuenta con protección para cargos no reconocidos en caso de robo o extravío, siempre que se reporten en un período menor a 48 horas después del incidente.
