El titular del DHS, John F. Kelly, hizo estas declaraciones luego de la tragedia que vivieron más de 40 inmigrantes indocumentados, incluidos varios mexicanos, al quedar encerrados en un tráiler frente a un centro comercial en San Antonio, Texas, sometidos a altas temperaturas.
“Esta tragedia demuestra la brutalidad de la red de la que hablo a menudo. Estos contrabandistas no tienen ningún sentido para la vida humana y buscan solamente beneficios”, aseveró el funcionario estadunidense.
El Departamento de Seguridad Interna y sus socios en los Estados Unidos, México y Centroamérica continuarán erradicando a estos contrabandistas, llevándolos ante la justicia y desmantelando sus redes, prometió.
“Los hombres y mujeres dedicados a la Inmigración y Aduanas de EU no sólo investigan y ayudan a enjuiciar este tipo de incidentes, sino que ellos y sus colegas de Aduanas y Protección Fronteriza trabajan duro día y noche los 365 días del año para prevenir muertes sin sentido y lesiones como éstas”, aseveró.
Manifestó que estos pusieron sus vidas en la línea para rescatar y salvar las vidas de los que intentan el traicionero viaje hacia el norte en la red de abuso y muerte.