-El segundo antes de competir: Mientras el Seat León Cupra arranca su motor 2.0 TSI de 300CV, la atleta checa se mentaliza para el lanzamiento. “Para concentrarme en lo que va a hacer mi cuerpo, mi cabeza tiene que estar completamente vacía. Busco un punto al otro lado del estadio y proyecto virtualmente mi lanzamiento hacia allí”, comenta antes de competir.
-Tres intentos y un ganador: Tras el pistolazo de salida, el Seat León Cupra pasa de 0 a 100Km/h en 4.9 segundos. Gracias a ello, gana a la jabalina en el primer lanzamiento de Barbora. En el segundo, la lanza arranca a una velocidad de siete metros por segundo y cruza el estadio de forma casi invisible a los ojos, superando al coche. En el tercero y último intento, a pesar de llegar a volar a unos 90 km/h, la jabalina no supera al Seat León Cupra, que se proclama finalmente vencedor.
-Espíritu ganador: El Seat León Cupra cuenta con dos récords en el circuito alemán de Nürburgring, un trazado de 21km y 73 curvas. En 2014 se convirtió en el compacto deportivo de tracción delantera más rápido y un año más tarde, marcó el mejor tiempo entre los vehículos familiares de su segmento. Por su parte, Barbora Špotáková tiene el récord mundial de lanzamiento de jabalina. Tras superar la mejor marca europea en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, ese mismo año batió el récord del mundo en el circuito mundial de atletismo de Stuttgart. Para la atleta checa, “esta es la prueba de que el trabajo duro, mis compromisos y toda mi paciencia tienen sentido”.
-A por el tercer oro: La campeona olímpica de jabalina y embajadora de Seat se prepara para sus quintos Juegos Olímpicos. “Fuerza, velocidad, una técnica excelente…y lo más importante, la mente. Aún no tengo los pies en Tokio 2020, pero si algo me motiva es lograr mi tercer oro”.
-Una vida llena de retos: Barbora Špotáková es amante de los desafíos que, según comenta, la han acompañado a lo largo de su vida personal y deportiva: “Uno de ellos fue volver al deporte después del nacimiento de mi hijo, o entrenarme para los Juegos Olímpicos de Río 2016 tras una lesión justo cinco meses antes de competir. Mi vida está llena de grandes retos”. Tras este encuentro, afirma que en su próxima cita con un Cupra Barbora traerá consigo su gran amuleto, un lémur de peluche.
