Así lo confirmó hoy una portavoz de la agencia de patrimonio israelí. Al parecer, los buceadores pensaron primero que se trataba de monedas falsas, pero cuando se dieron cuenta de que eran de oro informaron del hallazgo a las autoridades.
Según el director de la unidad arqueológica de la Marina, Kobi Scharvit, probablemente se trate de monedas procedentes de los restos de un barco que se dirigiera a Egipto con la recaudación de impuestos.
La dinastía ismailita de los fatimís, famosa por su legendaria riqueza, gobernó la región mediterránea entre los años 909 y 1171, con Egipto como sede del califato. (DPA)