Walkner sumó con la segunda plaza los puntos necesarios para conseguir el título a falta de una prueba, al llegar a Marruecos con una ventaja de 20 puntos al frente de la clasificación provisional del campeonato, para lograr su segundo título mundial.
Durante el Rally de Marruecos, Walkner aprovechó la primera jornada para recuperar velocidad tras una pausa de tres meses desde la anterior prueba, para ser cuarto, en tanto que en la segunda jornada, ya en las dunas de Merzouga, Matthias Walkner presionó desde el principio: dio caza a sus rivales y ganó la etapa con algo más de un minuto de ventaja, que le permitió situarse líder.
En la tercera etapa Walkner descendió hasta la cuarta posición al llegar a la mitad de la prueba, pero el ganador del Dakar de 2018 volvió a la carga para recuperar el máximo tiempo posible, y realizó una magnífica actuación que le llevó a perder por poco su segunda victoria de etapa por tan solo 36 segundos. En la quinta y última jornada, Walkner sumó los puntos suficientes para proclamarse campeón del mundo.
De las tres rondas del campeonato disputadas hasta ahora, Matthias Walkner ha mostrado una gran consistencia, terminando segundo el Rally de Kazajistán, vencer en el "Silk Way Rally", celebrado en Rusia menos de un mes después, y nuevamente segundo ahora en Marruecos, para afrontar ya con tranquilidad la última cita de la temporada en Abu Dhabi, antes de centrarse en el Dakar 2022.
"Ha sido un Rally muy bueno para mí y aunque salí esta mañana con la esperanza de ganar, cometí un pequeño error a mitad de camino que tal vez sólo me costó un minuto, pero fue suficiente, aunque el segundo puesto en la general es estupendo y ganar el título de campeón del mundo antes de tiempo es increíble", señaló tras su éxito Walkner.