De esta manera, Ferrer queda como el único español en el cuadro principal del certamen, después de la sorpresiva derrota de Rafael Nadal en la primera ronda.
En cuartos de final, el tenista ubicado en el puesto número 10 en el ranking mundial se medirá al alemán Dustin Brown, ganador ante su compatriota Jan-Lennard Struff por 7-6 (11-9) y 6-4.
"Brown es impredecible, es un jugador anárquico. Tiene un buen servicio y una buena volea, así que tendré que estar muy centrado en todos los puntos y ser consistente con el primer saque, porque con el segundo me va a presionar mucho", analizó Ferrer, finalista de Roland Garros en 2013.
Desde un primer momento, Ferrer marcó el ritmo del partido en la pista número uno del complejo Khalifa Internacional, rompiendo el saque de su rival en el quinto juego y aprovechando después una doble falta de Verdasco para hacerse con el primer parcial.
"En el segundo set tuve tres o cuatro pelotas para definir el partido, pero Verdasco sirvió muy bien en ese momento. De todas formas, estaba tranquilo, porque venía sacando bien, y Fernando sólo pudo quebrarme en una sola oportunidad", expresó el ganador.
El cabeza de serie número 4, cuya mejor actuación en Doha fue la semifinal de 2012, encadena ocho victorias consecutivas ante Verdasco con números apabullantes: desde 2011, Ferrer se apuntó 16 sets, contra sólo uno de su rival.
"Jugamos muchas veces entre nosotros, nos conocemos a la perfección. Nuestra carrera es similar, hace 13 o 14 años que estamos girando por el circuito. En la cancha tratamos de hacer lo mejor y afuera somos buenos amigos. Esto es sólo un trabajo", remarcó Ferrer.
El torneo de Doha, de categoría 250, se juega sobre pista dura y es uno de los certámenes que abre el calendario tenístico de 2015. (DPA)