Las pruebas, cuyo coste sufraga el pasajero, ofrecen resultados en aproximadamente 15 minutos, según explicó en un comunicado la compañía, que también ofrecerá a los pasajeros el envío por correo de otro tipo de pruebas que se pueden administrar a uno mismo en el hogar.
La aerolínea iniciará el programa el 15 de octubre y está colaborando con las autoridades hawaianas, que prevén dejar de requerir a todos los visitantes o residentes que regresan a casa someterse a dos semanas de cuarentena siempre que hayan dado negativo en una prueba en las 72 horas anteriores.
United será la primera aerolínea estadounidense que dará test -que son opcionales y cuyo coste asumirá el pasajero- y prevé aumentar la frecuencia de sus vuelos a Hawái aprovechando esta nueva situación.
"Nuestro programa de pruebas de COVID es otra forma de ayudar a los clientes a cumplir con los requisitos de entrada en destino, de forma segura y conveniente", señaló en la nota Toby Enqvist, responsable de clientes de United.
Según adelantó, la idea es ampliar el programa rápidamente para otros destinos y aeropuertos estadounidenses durante lo que queda de año.
Otras aerolíneas de EE.UU. han dicho que están estudiando comenzar a facilitar pruebas parecidas, mientras que el sector de la aviación comercial europea está demandando cada vez más que las cuarentenas preventivas a los viajeros se sustituyan por pruebas de COVID-19.
La aviación comercial se encuentra en una situación crítica por las restricciones impuestas para frenar la expansión del coronavirus y agravada por la incertidumbre de los viajeros, que al comprar un billete no saben si finalmente podrán volar a su destino o si las normas sobre las cuarentenas cambiarán de un día para otro.