Los aviones, un Hercules holandés y un aparato australiano, llegarán sobre las 16:00 hora local (14:00 GMT) a Eindhoven. Allí aguardan familiares de las víctimas y representantes del gobierno holandés, que les recordarán con una pequeña ceremonia y un minuto de silencio.

El miércoles llegaron a Eindhoven los primeros 40 ataúdes con restos de víctimas holandesas. Una columna de 40 coches fúnebres se desplazó ante la presencia de muchos ciudadanos al cuartel de Hilversum, donde los cuerpos serán identificados por 75 médicos forenses. Malasia y Nueva Zelanda enviaron forenses para que colaboren en estas tareas.

Los restos de las 298 personas que murieron en el avión serán trasladados a Holanda hasta mañana viernes. En total, 193 son holandeses, 43 malasios, 27 australianos, 12 indondesios, 10 británicos, 4 alemanes, 4 belgas, 3 filipinos, 1 canadiense y 1 neozelandés.

El primer ministro malasio, Najib Razak, descartó hoy que las 43 víctimas de su país puedan ser trasladadas a Kuala Lumpur antes del final del Ramadán, que concluye la próxima semana, ya que las tareas de identificación podrían prolongarse durante semanas o meses.

El gobierno de La Haya exigió entre tanto que una misión policial internacional proteja a los investigadores en el lugar en el que se estrelló el avión de Malaysia Airlines, en el convulso este de Ucrania.

El ministro de Exteriores holandés, Frans Timmermans, llegó hoy a Kiev junto a su colega australiana, Julie Bishop, para evaluar los próximos pasos. Según la prensa, Holanda y Australia están preparando una resolución para el Consejo de Seguridad de la ONU pidiendo que se permita el envío de una unidad armada a la zona del siniestro, que está en manos de los separatistas prorrusos.

El Consejo de Seguridad de Holanda, organismo independiente a cargo de la investigación, reclamó acceso ilimitado al lugar. Una semana después de la catástrofe los investigadores aun no pudieron llegar al lugar debido a la falta de seguridad.

Quienes sí pudieron visitar hoy la zona donde se encuentran los restos son los observadores de la OSCE y los expertos de Malasia y Australia. La Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) no informó sobre impedimentos por parte de los separatistas prorrusos. (DPA)