“Tendremos que hundir la EEI después de que agote su vida útil. No podemos dejarla en la órbita, es un objeto demasiado complejo y pesado que corre el riesgo de originar demasiada basura”, dijo Davidov en una entrevista publicada en la página web de Roscosmos.

“Acordamos con nuestros socios que la estación será operativa hasta 2020. En un principio su vida útil se había calculado en 15 años. Ya pasaron 13 años desde 1998 y es evidente que la EEI no ha agotado su potencial”, explicó Davidov en su entrevista retomada por la agencia Novosti.

Respecto a si será construida una nueva estación espacial, Davidov indicó que “hay varias posibilidades”.

“Hay varias opciones. Se puede, por ejemplo, atreverse directamente con la Luna o Marte”, opinó Davidov, sin embargo agregó que esta posibilidad no es muy factible puesto que todavía quedan asuntos pendientes en “el espacio cósmico cerca de la Tierra”.

La EEI repetirá el destino del complejo orbital ruso MIR, que fue hundido en el Océano Pacífico en el año 2000 en un “cementerio de naves espaciales” cerca de Isla Navidad, tras permanecer en funcionamiento de 1983 a 1998.

El acuerdo para la construcción de la EEI fue firmado el 29 de enero 1998 en Washington por representantes de Canadá, miembros de la Agencia Espacial Europea (ESA), Japón, Rusia y Estados Unidos.