El sismo se produjo muy cerca de la medianoche del lunes al martes, hora local, a unos diez kilómetros de profundidad y, aunque aparentemente mostró una magnitud de 7 grados y de 6.7, finalmente se redujo a 6.3, según el USGS.

Al parecer, no hubo amenaza de tsunami en la costa del Pacífico, según las fuentes.

El movimiento telúrico tuvo su epicentro a 60 kilómetros al norte de Huasco, en la región de Atacama, y se sintió en varias regiones del país, según el diario "La Tercera".

El responsable de la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) Ricardo Toro informó sobre la existencia de algunos desprendimientos poco importantes en la ruta que une Vallenar con Huasco y la que une Vallenar con Alto del Carmen, según el diario.

También señaló que los organismos técnicos se encuentran evaluando la situación y que se habían registrado algunos pequeños cortes en el suministro de energía en áreas de Atacama.