Enfermedades cardiovasculares, primera causa de muerte en el país

Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en el país, por lo que el presupuesto destinado a este rubro no puede ser regresivo, ya que al año se registran más de 100 mil defunciones, 274 cada día, afirmó la secretaria de la Comisión de Salud, Teresa de Jesús Lizárraga Figueroa (PAN).

Al inaugurar el foro “Legislativo sobre Enfermedades Cardiovasculares”, indicó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que para el 2030, el número de muertes en el mundo por esta causa aumentará a 23.6 millones. “El impacto social y económico que representa es impresionante, ya que alrededor del 80 por ciento de estos decesos son prematuros y afecta a la población menor de 70 años, dañando severamente a la Población Económicamente Activa”.

Señaló que en 2012 se invirtieron, tan sólo para atender enfermedades del corazón, siete mil 949 millones de pesos, por lo que consideró prioritario conseguir más presupuesto, “porque no se pueden aceptar estos números”.

Refirió que la atención de un infarto en México demora hasta 12 horas, cuando el promedio en países integrantes de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) es de 4 horas; por eso, la tasa de supervivencia que tenemos es la más baja de la OCDE y eso es lamentable”.

Es necesario trabajar en programas que garanticen a la población el derecho humano de la salud y realizar acciones que detengan las enfermedades cardiovasculares, cerebrovasculares y metabólicas.

Consideró que para atender esta problemática, es necesario contar con médicos y hospitales especializados en estas enfermedades. “Además de medicamentos, equipo y atención oportuna, se requiere presupuesto y una nueva política de salud pública”.

Hizo un llamado para que este tema sea prioritario en la agenda de todos los partidos políticos durante las próximas elecciones, para que quien llegue al gobierno lo aborde como acción fundamental.

Agregó que este foro fortalece el diálogo entre organizaciones civiles, entidades gubernamentales y el Congreso, ya que es aquí donde se legisla y se discute el presupuesto. “Hago votos para que en esta reunión resulten estrategias e instrumentos legislativos que permitan reducir el impacto catastrófico que las enfermedades cardiovasculares tienen en la vida de los ciudadanos”.