Unos les dan la credencial y el uniforme y otros, el sueldo y las ganancias”, señaló al destacar que el país se ha compuesto por víctimas de todo un sistema de complicidad entre las estructuras delictivas y del poder, “Son un grupo de delincuentes bien organizados y muy bien amarrados con las estructuras del poder y una millonada de victimas que andamos sueltos viendo como nos defendemos”.
En reunión con el grupo “Entidad Plural“, Gertz Manero consideró que la inseguridad en el país ha incrementado debido a la poca atención del gobierno para atacar el problema de raíz encubriendo delincuentes menores que después forman parte de las grandes organizaciones delictivas.
“El delito no comienza por generación espontánea, un individuo no se convierte en capo mafioso de un día para otro, estructurar este tipo de organizaciones lleva mucho tiempo”, explicó el rector de la Universidad de las Américas en México en su visita a la ciudad de Xalapa.
Todo empieza con delitos menores, agregó, donde delincuentes principiantes comenten robos y violaciones que no son castigados por las autoridades, “en complicidad con los policías, van pasando de ser unos delincuentes menores a ser de mayor rango y todo eso va pasado a ciencia y conciencia de las estructuras del poder, de la policía que los captura, el ministerio público, los jueces que los perdonan”.
Gracias a esto, aseveró, estos delincuentes menores pueden organizarse hasta crear o formar parte de una verdadera empresa delictiva “y es cuando la tienen que las autoridades apenas dicen que los van a empezar a combatir y no pueden ni siquiera detenerlos”.
De visita en Xalapa para apuntalar las campañas de la coalición "Salvemos a México", en la que el ex funcionario de Seguridad Pública va como candidato plurinominal, Gertz Manero aseguró que las acciones en contra de la delincuencia organizada no han sido las adecuadas.
"Siempre fue y es un problema de intereses políticos, finalmente no se va a poder resolver (el narcotráfico) si no cambiamos el sistema de seguridad y justicia del país", comentó.
Detalló que de seis años a la fecha ha existido una torpeza burocrática, pues nunca han existido trabajos coordinados entre la Procuraduría General de la República y la Secretaría de Seguridad Pública del gobierno federal.
Situación que escalonadamente se repite con las fuerzas de Seguridad Pública de las distintas entidades.
"Hay funcionarios y policías que tienen buena fe, hacen su trabajo, pero se enfrentan a un problema estructural que no los deja rendir frutos", acotó el ex funcionario federal.
"El sistema de seguridad y justicia de México está hecho para servir al poder y no para servir a la gente", fue el remate de Alejandro Gertz.
Acompañado del senador de Convergencia, Dante Delgado, y el líder estatal de este partido, Armando Méndez de la Luz, Alejandro Gertz Manero presentó ante empresarios, notarios, políticos y medios de comunicación, su propuesta ciudadana para reformar la constitución y crear un código penal único, una nueva ley nacional de menores infractores y de ejecución de penas y readaptación de sentenciados, entre otras acciones relacionadas con la seguridad y la justicia en el país.
Recordó su experiencia en el sexenio anterior en que se desempeñó como titular de la Secretaría de Seguridad Pública federal, destacando la falta de coordinación que existió con la Procuraduría General de la República para poder mejorar el desempeño de ambas dependencias.
Alertó que si bien es cierto que el gobierno del presidente Calderón ha obtenido logros en el combate al narcotráfico, aún quedan muchos temas por atender en materia de seguridad, pues las ejecuciones se han incrementado considerablemente. Ante ello, la percepción que existe entre la población es que la delincuencia organizada sigue haciendo de las suyas.
Mencionó que para hacer frente a los intereses políticos que muchas veces incurren en omisiones para combatir de manera enérgica a la delincuencia, es necesario llevar a cabo modificaciones profundas al sistema de procuración e impartición de justicia, destacando sus propuestas de reformar la Constitución federal, a fin de contar con un Código Penal único, una nueva Ley de Menores Infractores y de Ejecución de Penas y Readaptación de Sentenciados.
Se refirió también a la necesidad de la existencia de la “contraloría ciudadana”, figura autónoma que contribuiría decididamente a una mejor rendición de cuentas de las dependencias involucradas en el combate a la delincuencia y a la preservación de un entorno de seguridad que erradique las actuales condiciones de impunidad, donde se estima que el 98 por ciento de los delitos cometidos en el país quedan impunes.
En resumen, destacó que el actual estado de cosas sólo puede revertirse con la decidida participación de la ciudadanía.