"Estamos viendo constantemente la explosión de nuevas crisis en todo el mundo", señaló el director del evento, Juergen Boos, al presentar hoy la edición 66 que se celebra desde mañana hasta el domingo con Finlandia como país invitado de honor.
"Parece que en todas partes las partes en conflicto no están dispuestas a escucharse o abrirse al otro", añadió Boos, que consideró por eso que el libro es más necesario que nunca.
"La función del libro es la ‘movilidad’ cultural y espiritual. Todas las crisis que vive actualmente el mundo tienen que ver con la falta de eso”, dijo apuntando a las tensiones en Ucrania, Irak, Siria o Hong Kong.
En ese sentido, la Feria en Frankfurt actúa como “lugar de entendimiento, de acercamiento, de intercambio de ideas, donde se trabaja en todas partes para el entendimiento internacional”, describió Boos.
El director de la feria citó también las tensiones independentistas en Escocia o Cataluña. "Nuestro sector puede ser un motor de acercamiento también en Europa", concluyó.
Unos 300,000 visitantes participarán hasta el domingo en 3,860 lecturas, debates y conferencias de un millar de autores. La feria reúne a más de 7,200 expositores de más un centenar de países. Unos 9,300 periodistas acreditados cubrirán el evento para todo el mundo.
Boos subrayó que la nueva edición es “más internacional que nunca”. “Hasta ahora los expositores alemanes e internacionales se dividían en un 50 y 50 por ciento. Este año los internacionales suman un 65 por ciento”.
En el evento participan también editores de países en crisis como Afganistán, Siria o Ucrania. Boos destacó también el avance en esta edición de representantes de Asia y de América Latina. Por primera se presenta además vez un stand propio de países centroamericanos.
La Feria del Libro de Frankfurt se inaugura esta noche en un acto con la participación del ministro de Exteriores alemán, Frank-Walter Steinmeier, y del presidente de Finlandia, Salui Niinistö.(DPA)