La coalición de grupos y partidos políticos anunció este martes, el tercer día consecutivo de movilizaciones, que tras consultas con varios sectores profesionales decidió suspender la desobediencia y la huelga política de forma temporal y "reordenar la situación para que la resistencia continúe" con más fuerza.
Para ello, se organizarán comités de barrios y de cada sector profesional y de trabajadores para seguir adelante con las movilizaciones, que según un comunicado de las Fuerzas de la Libertad y el Cambio, han tenido un "éxito deslumbrante".
La nota aseguró que desde el domingo hasta el día de hoy la desobediencia civil alcanzó un "porcentaje elevado y en sectores vitales, en todas las ciudades sudanesas", sin ofrecer datos más precisos del seguimiento del parón.
"Este consenso civil sin precedentes es un mensaje claro al Consejo Militar sobre la fuerza del pueblo sudanés", agregó la coalición opositora, que integra a sindicatos, grupos de la sociedad civil y partidos políticos.
Asimismo, remachó que la desobediencia va a ser la opción de las Fuerzas de la Libertad y el Cambio hasta que los militares que gobiernan Sudán desde el pasado 11 de abril entreguen el poder a una autoridad civil.
La oposición llamó a la desobediencia en respuesta a la represión violenta de los manifestantes la semana pasada, cuando las fuerzas de seguridad irrumpieron en la acampada de protesta situada frente a la sede del Ejército en Jartum y se enfrentaron en las calles con los jóvenes que exigen el traspaso del poder a un Gobierno civil.
Al menos 61 personas -según el cómputo oficial- y 113 -según la oposición- murieron durante varios días de disturbios, lo que llevó a la oposición a suspender todos los contactos con las autoridades militares y a adoptar medidas de presión.
Por su parte, la junta militar suspendió los acuerdos alcanzados hasta el momento y convocó elecciones anticipadas en un plazo de nueve meses, al mismo tiempo que ha prometido investigar lo ocurrido.