Aunque reconoció que ha habido logros importantes, indicó que falta mucho por avanzar pues “muchos gobernantes y personajes de la vida pública se resisten a reconocer el derecho ciudadano de las mujeres", señaló en una editorial publicada en el órgano oficial de información "Semana GPPAN".
Vázquez Mota destacó que desde la fundación del Partido Acción Nacional (PAN), las mujeres “rompieron la costumbre” de permitir que se les minimizara, tomaron un rol protagónico que fue más allá de sus derechos políticos y se dedicaron a crear conciencia ciudadana.
Pese a ello lamentó que no hayan cristalizado los esfuerzos de las mujeres por alcanzar su reconocimiento en la administración pública en los tres órdenes de gobierno, en los Congresos y en el Poder Judicial.
Recordó el caso de Eufrosina Cruz, quien hace tres años ganó la presidencia municipal de Santa María Quiegolani, en Oaxaca, "pero los hombres de su comunidad, amparados en sus usos y costumbres, no reconocen el derecho de la mujer de votar y ser votada".
Ante situaciones como esa las mujeres deben fortalecer su derecho y libertad de decidir, actuar y pensar, ya que la política, al igual que otras actividades de la vida nacional, requiere de su participación.
Las mujeres no deben permitir "ser encasilladas o limitadas. No hay que temer a lo que está por venir, porque hoy más que nunca estamos claras de que es el momento de seguir adelante y de tener más audacia que fuerza para avanzar en tareas que fortalezcan las oportunidades”.
La coordinadora del grupo legislativo del PAN enfatizó que es necesario impulsar las agendas fundamentales y detener de una vez por todas la impunidad y la corrupción, además de democratizar la toma de decisiones y fortalecer a las instituciones.
"Nada nos han regalado, cada centímetro de avance nos ha costado, por eso no daremos marcha atrás", aseveró en su editorial, en el cual señaló que sorprende que en éste siglo XXI se cuestione si México está preparado para que las mujeres asuman liderazgos relevantes.
Eso jamás se pregunta entre varones, menos aún cuando quienes cuestionan de ese modo no hablan acerca de las seis millones de mujeres que encabezan un hogar, o minimizan que siete de cada 10 hogares en México cuenten con el ingreso producto del trabajo de las mujeres.
Vázquez Mota agregó que las barreras más grandes y graves están en las objeciones evidentes y veladas para impedirles a cientos de ellas asumir posiciones en donde la toma de decisiones hace la diferencia.
Por ello, debe ser un compromiso de cada legislador y legisladora consolidar y asegurar los avances logrados hasta ahora, así como ser las voces de aquellas que, desde la injusticia y el dolor, no tienen forma de hacerse escuchar.