Al cierre del primer semestre de 2023 los indicadores proyectados del banco que se reportan periódicamente a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNVB) muestran una mejora sostenida. El Índice de Capitalización (ICAP) alcanza 13.3%, por arriba del reportado en el primer trimestre con 12.2%. El Coeficiente de Cobertura de Liquidez (CCL) registra un 264.53%, como consecuencia de la llegada de nuevos ahorradores.
La primera mitad del año ha dejado de manifiesto la confianza y entusiasmo de clientes habituales y los nuevos clientes que ven en el rumbo del banco, oportunidades para cuidar sus recursos y materializar sus proyectos. Esta dinámica ha impulsado la captación de Bankaool a su mejor nivel en los últimos 4 años, con aproximadamente 700 millones de pesos captados y un portafolio de crédito con más de 500 millones de pesos.
Al referirse a dichos resultados, Juan Antonio Pérez-Simón González afirmó: “La nueva visión estratégica de liderazgo de Bankaool establece que Chihuahua tiene todo para convertirse en el gran polo económico del norte del país compitiendo de tú a tú con Nuevo León”.
Esta transformación, se complementa con el lanzamiento de la nueva imagen de Bankaool. Este hito en la institución tiene como propósito reflejar en la identidad gráfica el compromiso del banco para colocar al alcance de cualquier persona, servicios financieros digitales, ágiles, transparentes y sencillos.
Las sucursales de Oasis y Ortíz Mena en Chihuahua, son las primeras con esta nueva imagen, mostrando en sus instalaciones la institución moderna, accesible e inclusiva en la que se convierte Bankaool. La implementación continuará a lo largo del año en el resto de nuestras sucursales y demás elementos gráficos de la institución como parte de la experiencia de banca intuitiva que el banco ofrece para los clientes que deseen atención en sucursal, mientras se habilitan las alternativas tecnológicas para los usuarios que prefieran gestionar sus finanzas de manera remota.
En el núcleo de su filosofía, Bankaool busca empoderar a las personas y las empresas, permitiéndoles desarrollar todo su potencial, además de contribuir al crecimiento de las economías locales. Con los primeros resultados de su transformación, la inclusión financiera deja de ser una aspiración para convertirse en una realidad tangible.