Los "Guardianes del Tiempo" devuelven el brillo a los tesoros del Kremlin

Reliquias de los museos del Kremlin de un valor incalculable como iconos o gorros de diamantes, algunos de ellos nunca vistos por el gran público, salen a la luz gracias a la desconocida labor restauradora de los "guardianes del tiempo".

Etiquetas: 

El Kremlin ha decidido hacerles un homenaje con una exposición para la que han sido seleccionadas 87 piezas, entre ellas una corona y un icono de los venerados santos Boris y Gleb.

"Esta corona pertenecía a la emperatriz Anna Ioánnovna (1730-1740). Fue hecha especialmente para su coronación. La restauración de la pieza, adornada con 2.500 diamantes, duró un año. Durante siete décadas no se había restaurado", dijo a Efe Irina Máslennikova, comisaria de la muestra.

Máslennikova recordó que el tiempo que emplean los restauradores en el tratamiento de los vetustos objetos de arte suele variar y puede prolongarse por meses, años, o en casos excepcionales, incluso décadas.

"Algunas piezas son restauradas durante un tiempo muy largo. Especialmente en lo que se refiere a los iconos", apuntó, al tiempo que precisó que el icono de Boris y Gleb lleva tres años en proceso de restauración y pese a participar en la exposición, aún necesita varios años de trabajo para recuperar el aspecto original.

En total, el Kremlin tiene 27 "guardianes" en plantilla, que se encargan de preservar la magia de sus tesoros históricos.

El equipo de los "guardianes" está formado por representantes de 4 talleres expertos en: restauración de metal, pintura, tela y materiales gráficos, incluidos libros, cartas y otros objetos de papel. 

La exposición abarca un periodo comprendido entre el siglo XV ,"si no contamos un icono pintado en una pizarra del siglo XII", y principios del XX.

Las obras a restaurar son seleccionadas según su estado de conservación y sólo después de evaluaciones previas en las que los especialistas sopesan los riesgos para la obra del proceso restaurador.

"Se busca un equilibrio entre un resultado aceptable de la restauración y la imagen original del objeto", según la comisaria.

Otras de las piezas más destacadas de la exposición para Máslennikova son los majestuosos gorros de diamantes de los zares Iván Alexéevich y Pedro Alexéevich, así como un casco renacentista y una original nevera para el vino hecha de cristal y plata y regalada a Pedro el Grande por el rey de Dinamarca. 

En ocasiones, durante la restauración de las reliquias, los "guardianes" de los Museos del Kremlin realizan descubrimientos, dijo la comisaria.

"Hemos descubierto tanto firmas del autor como fechas y acontecimientos históricos que están relacionados con las piezas", señaló.

Explicó que, en particular, las últimas labores de restauración permitieron revelar la firma original en un icono de Nuestra Señora de Jerusalén, que data de 1715.

"Antes era solo un icono anónimo de los inicios del siglo XVIII, pero ahora es un icono de autor", puntualizó. 

A la vez, negó que los "guardianes del tiempo" vayan a realizar exposiciones "regulares", porque para ello "se requiere un motivo específico", que en este caso fue la restauración de "varias reliquias estatales" a la vez. 

La muestra, que ha despertado interés entre el público de diversas edades, incluidos los visitantes más pequeños a los que se pudo ver contemplar con admiración el renovado brillo de los tesoros de antaño, estará abierta hasta el 13 de octubre.