La ofensiva de los Chiefs hizo recordar a aquella que los llevó a ganar 31-20 el Super Bowl LIV ante los San Francisco 49ers, en un choque en el que su quarterback Patrick Mahomes fue nombrado mejor jugador del partido (MVP).
Ante los Cardinals, Mahomes fue una máquina que lanzó cinco envíos de anotación; pasó para 360 yardas, completó 30 de 39 envíos y no sufrió ninguna intercepción.
El pasador de 26 años se unió a las leyendas Drew Brees, Peyton Manning, Ben Rothlisberger, Dan Marino, retirados, y Tom Brady en sumar seis partidos con al menos cinco pases de anotación.
Hay que sumar la combinación que Mahomes tiene con el ala cerrada Travis Kelce, una de las más complejas para las defensivas rivales.
Kelce atrapó ocho pases para 121 yardas, contra Arizona, y se unió a los retirados, Rob Gronkowski, y al miembro del Salón de la Fama, Tony Gonzalez, como los únicos alas cerradas en la historia de la NFL con al menos 30 juegos de más de 100 yardas.
Ese poder ofensivo junto a una línea defensiva que presiona al pasador rival, logró tres capturas ante Cardinals, confirma al equipo del entrenador Andy Reid como uno de los favoritos para ganar la Conferencia Americana y llegar al Super Bowl.
En Los Angeles, los Bills, el otro favorito de la AFC, maltrataron 31-10 al campeón encarrilados en una gran actuación de su mariscal de campo Josh Allen con tres pases de anotación.
A Allen, de la misma edad que Mahomes, se le nota más maduro a pesar de la presión a la que fue sometido por la defensiva de los Rams que lo capturó dos veces y le interceptó un par de envíos.
Durante la temporada baja el nativo de Firebaugh, California, estudió formas distintas para mejorar sus envíos; recurrió a un entrenador personal y a la tecnología como herramientas.
"Quiero ganar sin importar cómo hacerlo. No importa qué tan duro sea, si tengo que chocar en vez de deslizarme lo haré para ganar", dijo al final del duelo ante los Rams del jueves pasado.
El talento en los jóvenes quarterbacks de la Conferencia Americana no para en Mahomes y Allen.
Los Angeles Chargers demostraron que están listos para plantar cara con Justin Herbert, de 24 años, quien se presentó en la temporada 2022 con tres pases de anotación en la victoria 24-19 sobre Las Vegas Raiders el domingo.
Herbert vivirá su tercera campaña en los Chargers; en 2021 se quedó a un triunfo de llevar a su equipo a playoffs, pero su talento está fuera de duda; fue el segundo en la liga con 5.014 yardas aéreas y tercero con 38 pases de touchdown.
En la Conferencia Nacional la juventud de los pasadores de Bears, Justin Fields, 23 años, y de 49ers, Trey Lance, de 22, aún los tienen lejos de llevar a sus equipos a contender por el campeonato.
El camino en la NFC está reservado para los veteranos encabezados por Tom Brady, quien a sus 45 años quiere un octavo anillo, Aaron Rodgers, de 38 años, y el actual campeón Matthew Stafford, de 34, quienes buscarán triunfar en un segundo Super Bowl.