El Consejo Ejecutivo del COI señaló a través de un comunicado que suspende provisionalmente al Comité Olímpico Brasileño y, por consiguiente, “congelará subsidios y pagos del COI al COB”, entre ellos los vinculados a los Juegos Olimpicos de 2016.
El organismo olímpico aclaró que los atletas brasileños no resultarán afectados por su decisión, y por lo tanto podrán participar en las competiciones deportivas olímpicas internacionales.
Nuzman, arrestado el jueves en Brasil por estar en el centro de un escándalo de compra de votos a favor de la candidatura olímpica de Río de Janeiro 2016, fue suspendido como miembro honorario del COI y de la comisión de coordinación de los Juegos de Tokio 2020.
La decisión del COI se produce un día después de la operación policial en Río de Janeiro, en un intento del organismo internacional de blindarse ante los posibles desdoblamientos de las investigaciones para esclarecer cómo la corrupción fue utilizada por autoridades brasileñas para ganar la candidatura ante Madrid y Chicago en 2016.
Nuzman y su brazo derecho en el comité organizador de Río-2016, Leonardo Grayner, fueron detenidos preventivamente por la policía federal brasileña, que los acusa de “corrupción, lavado de dinero y asociación ilícita”.
Nuzman, ex jugador profesional de voleibol, habría sido el intermediario entre el gobierno del estado de Río de Janeiro para sobornar a Papa Massata Diack, hijo de Lamine Diack, expresidente de la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF), por al menos dos millones de dólares para que Río de Janeiro recibiera el voto favorable en la elección de las Olimpiadas de 2016.
La cuenta usada para abonar esa coima sería la misma utilizada por intermediarios del exgobernador de Río, Sergio Cabral, condenado y encarcelado por corrupción, para recibir el pago de gratificaciones a cambio de cometer fraude en licitaciones a favor del empresario brasileño Arthur Soares, residente en Estados Unidos y también investigado en la trama olímpica.
Reportes de la Hacienda brasileña revelaron que Nuzman, de 75 años, habría duplicado su patrimonio en vísperas de los Juegos Olimpicos 2016, pasando de 3.2 millones de reales (un millón de dólares) en 2009, a nueve millones (2.8 millones de dólares) en 2015.
La Fiscalía también señaló que, tras el allanamiento de su casa en Río el 5 de septiembre pasado, cuando fue deflagrada la Operación Unfair Play (“juego sucio”), Nuzman rectificó su declaración de la renta para incluir 16 barras de oro, cada una de un kilo, depositadas en una caja de seguridad en Suiza, cuya llave estaba en el domicilio del investigado.
Jugador de voleibol en los Juegos de 1964, Nuzman preside el Comité Olímpico Brasileño desde 1995, y acumuló a ese cargo el del presidente del Comité Organizador de los Juegos de Río 2016, algo inusual.