Esta es la advertencia que la agencia de medición de riesgo Standard & Poor's (S&P) hace en un informe titulado "¿Por qué Basilea III y Solvencia II dañarán la financiación corporativa más en Europa que en Estados Unidos?".
El estudio analiza cómo van a afectar al sector empresarial los nuevos esquemas regulatorios que imponen Basilea III y Solvencia II.
El impacto para las empresas podría ser costes de financiación más altos, una menor accesibilidad al crédito a largo plazo y una base de capital inversor más baja.
"Esperamos que el impacto sea mayor en Europa porque las empresas tradicionalmente dependen más de los bancos para financiarse que sus homólogas en Estados Unidos", dice el informe.
Los costes de financiación podrían aumentar entre 3,000 y 50,000 millones de euros para las empresas de la zona del euro y entre 9,000 y 14,000 millones de dólares (unos 6,620 y 10,300 millones de euros) para las empresas estadounidenses.
Estas cifras representan un incremento de entre el 10 y el 20 por ciento de los costes de intereses para las empresas en Europa y Estados Unidos, dependiendo de los objetivos de rentabilidad de los bancos del 8 al 15 por ciento.
La introducción de las nuevas normativas para bancos y aseguradores podrían resultar, en el mejor de los casos, en una revisión de precios y, en el peor, en un racionamiento del crédito para las empresas de todo el mundo, según S&P.
Basilea III es un acuerdo sobre la regulación del capital de las entidades financieras promovido por el Banco de Pagos Internacionales (BPI), que fue aprobado en septiembre de 2010 y que se irá aplicando hasta 2018.
La nueva regulación para las aseguradoras, que se va a aplicar a partir de 2013, se denomina Solvencia II.