El presidente de BIVA, Santiago Urquiza, reafirmó la misión de su institución para captar empresas debutantes en el sistema bursátil mexicano, pero no desechó la posibilidad de atraer a compañías en cotización dentro de la BMV. En un plazo de tres años, se pretende atraer al menos a 50 negocios hacia la nueva bolsa de valores, y así incrementar el actual número de negocios en el mercado bursátil de 146 a 196 en un periodo de tres años.
BIVA fue presentado ante la SHCP, Banco de México y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) por primera vez desde febrero de 2013. Dos años y medio después presentó a Hacienda su solicitud formal de concesión para operar. Aunque aún falta terminar de implementar su conexión financiera con las casas de bolsa, el proyecto de Cencor confía en comenzar operaciones para enero del 2018.
Actualmente BMV percibe un volumen de ganancias netas superior a los 583 millones de pesos, al primer semestre del 2017
Uno de los principales atractivos de esta nueva competidora es su integración con la tecnología Nasdaq X-stream Trading, ampliamente utilizada en más de 60 bolsas de valores de todo el mundo y con la cual pretenden otorgar un valor agregado a su propuesta, Además, han ofrecido menores precios en operaciones como el listado, mantenimiento y transacciones tanto a emisores, intermediarios financieros y clientes.
Aparte de precios más competitivos y una infraestructura tecnológica superior, BIVA también quiere abrir el mercado de valores a las medianas empresas emprendedoras; pues ha fijado un valor de capitalización menor que la BMV. Con este propósito, la institución liderada por Urquiza aceptaría a compañías con un patrimonio mínimo de 500 millones de dólares.
Durante la ceremonia donde se le entregó la concesión de operaciones a BIVA, el titular de la SHCP José Antonio Meade afirmó la necesidad de una nueva bolsa de valores en México, con el fin de lograr mayor inversión de los fondos personales, fortalecer el mercado bursátil, y desarrollar de forma más dinámica la economía nacional. La nueva competidora de la BMV debe demostrar todavía ante la CNBV que cumple con todas las condiciones de funcionamiento, al menos 30 días antes de comenzar actividades.