Sony amplió su beneficio un 53.3 % entre abril y junio sustentado por los videojuegos

El grupo Sony anunció hoy que entre abril y junio pasados aumentó su beneficio neto un 53.3 % respecto al mismo período de 2019, hasta 233,251 millones de yenes (1,870 millones de euros), por el buen rendimiento de sus sectores de videojuegos y financiero.

Por su parte, el beneficio antes de impuestos (ebit) del grupo creció un 38.5 % en dicho período, hasta 319,919 millones de yenes (2,560 millones de euros); mientras que su ganancia operativa bajó un 1.1 %, hasta 228,395 millones de yenes (1,830 millones de euros).

Sus ingresos por ventas crecieron un 2.2 % en el citado trimestre, hasta 1.97 billones de yenes (15,770 millones de euros), de acuerdo con los datos facilitados hoy por Sony y correspondientes al primer trimestre de su ejercicio fiscal.

Sony atribuyó el aumento de sus beneficios principalmente al buen rendimiento de sus sectores de videojuegos y financiero.

El conglomerado explicó que aunque la producción de su consola PlayStation 4 (PS4) se vio impactada por los problemas de suministro derivados de la pandemia de coronavirus, "esos problemas ya están solucionados", y tanto la venta de copias digitales de juegos como las suscripciones a sus servicios Plus y Now "han aumentado significativamente".

Sobre el lanzamiento de su nueva plataforma, PS5, Sony reiteró que el desarrollo no ha encontrado mayores problemas y su lanzamiento sigue previsto para finales de 2020.

Aunque la empresa elogió el rendimiento de su sector financiero, en el que ha experimentado un aumento de sus servicios de consultoría a distancia, advirtió de que "las posibles fluctuaciones en el mercado financiero podrían impactar los resultados financieros de este sector en adelante".

Estos avances lograron compensar los malos tiempos que atraviesan tanto el sector musical como el cinematográfico, con artistas y profesionales de todo el mundo incapaces de desarrollar fluidamente su trabajo debido a la propagación del coronavirus SARS-CoV-2.

El retraso del lanzamiento de discos por las dificultades para las grabaciones, así como la cancelación de conciertos y otros eventos en todo el mundo han golpeado duro al sector musical de Sony.

El retraso de los rodajes y otras producciones han causando también una reducción en los ingresos por licencias.

Del mismo modo, el cierre de muchas salas de cine alrededor del mundo ha afectado a la recaudación en taquilla, y los rodajes de nuevas producciones siguen viéndose igualmente afectados, lo que ha afectado también a sus ingresos por labores de márquetin.

El conglomerado japonés ofreció este martes su primera previsión de resultados para el ejercicio actual de 2020, tras evitar hacer una estimación anteriormente para valorar el impacto de la pandemia.

Para el ejercicio fiscal en curso, que finalizará el 31 de marzo de 2021, Sony prevé una caída de su beneficio neto del 12.4 % hasta 510,000 millones de yenes (4,100 millones de euros/4.836 millones de dólares) y una caída del 26.7 % en su ganancia operativa hasta 620,000 millones de yenes (4,960 millones de euros/5,840 millones de dólares).

El conglomerado espera, no obstante, ampliar sus ventas un 0.5 % hasta 8.3 billones de yenes (66,500 millones de euros/78,200 millones de dólares), ante una previsión favorable en su sector de videojuegos con el lanzamiento de su consola PlayStation 5 y en su rama de servicios financieros.