El delegado estatal de la Semarnat, Daniel Vega Villanueva, comentó que los vehículos provocaron desprendimiento de gasolina y aceite, por lo que urgieron las tareas para la extracción.
Explicó que de no retirar los coches del mar provocaran una gran contaminación, de momento es mínima, pero no pueden permanecer más tiempo dentro, ya que los materiales de los vehículos son dañinos para la fauna marina.
“El ser algo diferente al mar representa una contaminación, lo primero que se tiene que hacer es una recomendación para platicar con la Marina y tratar de sacar los vehículos”, indicó.
Reconoció que los únicos responsables de que los vehículos se encuentren en el mar son los dueños, porque se informa en un letrero que no se puede estacionar, “es incumplido por turistas y acapulqueños, principalmente en temporada de lluvias y huracanes”.
Con respecto a la obra del paso elevado Bicentenario dijo que la construcción cuenta con los requisitos legales, descartó que represente un riesgo para la población, aun cuando las inundaciones continúen en el área.
Sin embargo, dijo tener conocimiento que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) tiene 90 días hábiles para hacer una revisión exhaustiva como lo solicitaron organizaciones y grupos partidistas.