Al Asad tiene cada vez menos opciones de retener el poder, según Medvédev

El presidente sirio, Bachar al Asad, tiene cada vez menos opciones de retener el poder, afirmó hoy Dmitri Medvédev, primer ministro ruso, en una entrevista con el canal de televisión CNN.

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El presidente sirio, Bachar al Asad, tiene cada vez menos opciones de retener el poder, afirmó hoy Dmitri Medvédev.

"Cada día, cada semana, cada mes que pasa, las opciones de que (Al Asad) se mantenga en el poder son cada vez menores", señaló Medvédev, según informa la página web del Gobierno ruso.

Medvédev destacó que "Al Asad se equivocó a la hora de poner en marcha las reformas políticas".

"Lo tenía que haber hecho mucho más rápido, atrayendo a su bando a la oposición más moderada que estaba dispuesta a sentarse con él. Ese fue su mayor error, puede que fatal", subrayó.

Con todo, el jefe del Gobierno ruso insistió en que debe ser el pueblo sirio el que decida la suerte de Al Asad: "Ni Rusia, ni Estados Unidos, ni ningún otro país" debe hacerlo.

"Ahora, lo más importante es garantizar un proceso de reconciliación nacional", señaló.

De lo contrario, los grupos opositores formados en el exterior "exterminarán a los representantes de otras corrientes del Islam y de otras confesiones, algo que ya están haciendo".

"Por eso, o una reconciliación nacional que debe transcurrir bajo el control de la comunidad internacional o una interminable guerra civil. No hay otra alternativa", señaló.

Medvédev subrayó que "en la mesa de negociaciones deben sentarse todos -suníes, chiítas, alawitas, drusos y cristianos-. Si alguien es expulsado, la guerra civil proseguirá".

"La guerra civil ya está en marcha y la culpa la tienen en la misma medida las autoridades del país y la oposición intransigente que, en gran medida, está integrada por islamistas radicales", señaló.

Medvédev llamó a Estados Unidos, los países europeos y las potencias regionales como Arabia Saudí y Catar a persuadir a las partes en conflicto a dialogar.

"Y no sólo exigir que Al Asad se vaya y después que lo ejecuten como a (el líder libio, Muamar el) Gadafi o lo lleven en camilla a juicio, como ocurre ahora con (el líder egipcio, Hosni) Mubarak", apuntó.

Además, negó que Rusia se planteara en algún momento como objetivo diplomático el mantenimiento a toda costa en el poder de Al Asad, del que reconoció que encabeza un régimen "que reprimía prácticamente toda actividad política".

El viceprimer ministro sirio, Kadri Yamil, aseguró la víspera a la emisora de radio "Eco de Moscú" que Rusia sigue suministrando armamento a Siria en virtud de contratos firmados antes del estallido del actual conflicto.

Rusia suministra a Damasco "el armamento necesario para la defensa de la soberanía del país. Siempre existe la amenaza de una agresión israelí", dijo.

El Kremlin se opone a una injerencia exterior en Siria, aunque niega que Al Asad sea su aliado y aboga por un transición política en la que participen Gobierno y oposición, según los acuerdos de Ginebra de junio de 2012.