Ante nuevo escenario internacional, impostergable para méxico una nueva reforma a la Reforma Energética de 2014, sostiene Zambrano

Jesús Zambrano Grijalva, vicecoordinador del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en la Cámara de Diputados advirtió que ante el escenario que se presenta para México en menos de dos semanas que inicia el nuevo año, es impostergable una reforma a la “Reforma Energética” aprobada por el Congreso de la Unión en 2014 que, en los hechos ha dado un saldo negativo para el país y es un fracaso. Indicó que la ya visible quiebra de PEMEX será dañina –incluso- para los propósitos entreguistas del gobierno de Peña Nieto.

Zambrano Grijalva expuso también que el Gobierno Federal debe informar lo antes posible si habrá incentivos fiscales para los combustibles ahora que ya hay avisos de un incremento de hasta tres pesos por litro al costo de la gasolina en las zonas que iniciarán con el proceso de liberación en nuestro país a partir del 1 de enero, pues ello implicará un encarecimiento de costos con la consecuente pérdida del poder adquisitivo de la gente.

“Desde un principio advertimos en la Ley de Ingresos y el Presupuesto de Egresos que no avalaríamos la liberación a los precios de los combustibles porque ello implicará alzas de precios del 17 al 20 por ciento; y sin embargo, lo están haciendo”, enfatizó.

El legislador precisó en este sentido que los mexicanos debemos recuperar a Pemex como empresa productiva y generar nuestros propios insumos de cara a la situación adversa que se nos presenta con la asunción de Donald Trump al gobierno de los Estados Unidos de América; pero no podemos competir ni fortalecernos con una regulación como la que tenemos actualmente donde el gobierno ha quitado recursos y reservas petroleras; yacimientos y campos productores; instalaciones y valiosa infraestructura; además de miles y miles de kilómetros de gasoductos.

“Todo –añadió- sin pagar a Pemex, el justo precio por los activos que le ha arrebatado y al mismo tiempo, le ha impuesto severos recortes presupuestales, así como una tributación aún mayor a la que tenía antes de la reforma; le ha ordenado desprenderse de clientes y mercados; y lo ha orillado a renunciar a la investigación y al desarrollo tecnológico, propios. Con tal de ‘achicar’ a Petróleos Mexicanos, el Gobierno llega incluso al extremo de no cumplir con su propia Reforma”, acusó Zambrano.

“Hace tres años, cuando Peña Nieto impulsó la Reforma Energética, aseguró que la finalidad de la misma era la modernización y fortalecimiento de Pemex; que su mejoramiento era el objetivo fundamental; que la remodelación completa del marco jurídico no tenía otra intención que solucionar los problemas de la mayor empresa del país, y que gracias a la reforma, Pemex aumentaría la producción, sería más eficiente y se convertiría en una empresa de clase mundial”.

Sin embargo, añadió el legislador federal, a la fecha, los mexicanos somos los menos beneficiados y “en lugar de ser un instrumento de cambio positivo para encarar –incluso- los retos por venir, nos estamos encaminando nuevamente a tener que subsidiar con recursos públicos a las empresas del Estado”.

Jesús Zambrano destacó que el país tiene en Petróleos Mexicanos las condiciones para desarrollarse y crecer, pues indicó que las actividades de exploración y producción realizadas desde la expropiación y nacionalización de la industria petrolera, permitieron obtener valiosa información y conocimientos del subsuelo, así como localizar, delimitar y desarrollar yacimientos, con sus respectivas reservas y recursos, infraestructura y demás activos.

Sin embargo, expuso, hoy con la regulación que se hizo, en lugar de ser la base para el crecimiento, se entrega a privados por la vía de contratos o alianzas.

El diputado Federal enfatizó que si bien estas últimas son comunes en la industria petrolera internacional y pueden significar un respiro para las necesidades de inversión de Pemex, también es cierto que recurrir a ellas de manera reiterada, terminará convirtiéndolas en un mecanismo de cesión creciente de la renta petrolera.

“El caso último de Trión –precisó- está como ejemplo: Pemex asumió todo el riesgo geológico de la exploración, BHP Billiton invertirá ya sabiendo que hay una gran cantidad de petróleo y, cuando el yacimiento produzca, se quedará con el 60 por ciento del valor del crudo extraído”.

“Ha quedado claro que al gobierno de Peña Nieto no le interesa tener una empresa petrolera pública sólida, integrada e integral; presente en toda la cadena de valor de los hidrocarburos. Su único propósito es convertir a Pemex en una simple administradora de contratos de exploración y producción de petróleo crudo. El verdadero objetivo es construir una industria petrolera privada y quiere avanzar lo más posible en esa dirección antes de que concluya su sexenio”, manifestó.

“Coyunturalmente el gobierno peñista está interesado en estabilizar las finanzas de Pemex para mejorar la calidad crediticia de la empresa, porque lo necesita como instrumento para seguirse endeudando. En el fondo, lo que busca es: limitar, reducir, diluir y desmantelar a Pemex, su cinismo no tiene límites como su entreguismo tampoco. Con las violaciones que han hecho y siguen haciendo a la ley, se hacen responsables de daño al patrimonio nacional por miles de millones de pesos”, condenó.

Zambrano Grijalva planteó finalmente que la reforma que tendrá que ser impulsada ante la nueva coyuntura, es la que el PRD propuso a principios del 2013 para generar riqueza con desarrollo y empleo internos; fortaleciendo a esta y las demás empresas propiedad de la nación con mejor tecnología, planeación y sin corrupción, que es lo más importante.