En el encuentro, Irán y los cinco países con poder de veto en la ONU más Alemania tendrán que fijar un nuevo calendario para continuar las negociaciones nucleares.
La jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, y el ministro de Exteriores iraní, Mohamed Yawad Sarif, participarán tanto en la cita de Múnich el 31 de enero como en la de Davos el 22 de enero, lo que supone dos ocasiones para próximos encuentros nucleares, dijo Araghchi.
Además, Irán se mostró hoy dispuesto a hacer nuevas concesiones, como la firma de un protocolo adicional del Organismo Internacional para la Energía Atómica (OIEA) que procura a los inspectores realizar controles a las instalaciones nucleares de forma más fácil y sin avisar previamente.
"Irán no tiene nada que ocultar y para despejar las preocupaciones de la comunidad internacional podría firmar el protocolo adicional", dijo Araghchi. Sin embargo, según la Constitución, el gobierno necesita la aprobación del Parlamento.
Irán y la comunidad internacional acordaron ya un acuerdo provisional que será implementado a partir del lunes 20 de enero, según el cual Irán suspenderá en los próximos seis meses parte de su controvertido programa nuclear a cambio de que la comunidad internacional levante parte de las sanciones contra el país. En esos seis meses las partes deben negociar un acuerdo definitivo.