El documento, al que tuvo acceso la agencia dpa, insta a todos los países a mantener la lucha contra el terrorismo en consonancia con los derechos humanos, en particular en materia de privacidad, y a establecer mecanismos independientes para controlar y sancionar cualquier violación a esos derechos.
También pide que cada país "revise sus procedimientos, prácticas y legislación sobre vigilancia extraterritorial de comunicaciones privadas e intercepción de datos personales de ciudadanos en el extranjero" para asegurar que "cumplen con todos los requisitos de la legislación internacional de derechos humanos"
"La privacidad en Internet es una cuestión cada vez más importante, debido a que el rápido avance tecnológico permite a personas de todas las regiones usar nuevas tecnologías de información y comunicaciones", reconoce el borrador.
Por eso advierte que la capacidad "para espiar, descifrar y recolectar datos de forma masiva, lo que puede implicar una grave intrusión en el derecho a la privacidad de las personas".
El borrador, que podría llevar el título "El derecho a la privacidad en la era digital", subraya finalmente que "el ejercicio del derecho de la intimidad es un requisito esencial del derecho a la libertad de expresión y de sostener opiniones sin obstáculos, así como uno de los fundamentos de la sociedad democrática".
El texto fue elaborado conjuntamente por los gobiernos de la canciller alemana, Angela Merkel, y de la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, dos de los líderes al parecer espiados directamente por la inteligencia estadounidense.
El ministro de Exteriores alemán, Guido Westerwelle, busca un acuerdo internacional para evitar que se repita la situación. "La defensa eficaz de la privacidad sólo puede lograrse a nivel global", dijo a la agencia dpa. "Por eso apuesto a una amplia alianza en la comunidad internacional para la defensa de la intimidad".
El borrador de Alemania y Brasil pasará primero por la comisión de Derechos Humanos. Se da por hecho que contará con un amplio apoyo en la Asamblea General de la ONU. Este tipo de resoluciones no tienen carácter vinculante, pero sí un fuerte carácter simbólico.