Terceros países transmiten de vez en cuando "mensajes generales", indicó el mandatario.
Por ejemplo, Siria sabía anticipadamente que se iba a producir un bombardeo contra el bastión yihadista de Al Rakka en el norte del país, aunque no conocía los detalles, dijo Assad.
Damasco no da en cambio informaciones sobre sus propias operaciones en la guerra civil siria. "Si hacemos algo en nuestro territorio, no preguntamos a nadie ni se lo decimos a nadie. Sencillamente lo hacemos", dijo.
Assad calificó de "infantiles" las acusaciones de la organización de derechos humanos Human Rights Watch, que afirma que las tropas del Ejército utilizan armas prohibidas por la comunidad internacional, como bombas-barril. "Nunca he oído que el Ejército use barriles o quizás ollas", aseguró, y añadió que "no hay bombas de racimo" ni se usa tampoco gas cloro. (DPA)