Las delegaciones de ambos países se reunieron para una nueva ronda del diálogo relanzado en julio de 2013. Aunque no tienen relaciones diplomáticas desde hace más de medio siglo, La Habana y Washington tienen contactos en temas puntuales. El acercamiento se ha incrementado bajo la presidencia de Barack Obama.
"La reunión se desarrolló en un ambiente respetuoso", señaló la parte cubana en un comunicado. Las delegaciones analizaron "las medidas emprendidas por ambas partes para enfrentar la migración ilegal y el contrabando de migrantes", agregó.
"La delegación cubana insistió nuevamente en que estos fenómenos no podrán erradicarse (...) mientras no se deroguen la política de pies secos-pies mojados y la Ley de Ajuste Cubano", indicó también el texto difundido por el Ministerio de Exteriores de La Habana.
La ley de Ajuste Cubano, aprobada en los 60, y la norma llamada "pies secos, pies mojados" de 1995, da prerrogativas para empezar a tramitar residencia en Estados Unidos a los cubanos que lleguen aun de manera ilegal, apenas pisen suelo norteamericano ("pies secos"). Sólo en caso de ser capturados en el mar ("pies mojados") son repatriados a Cuba.
Estados Unidos y Cuba retomaron los encuentros migratorios que celebran desde 1995 en julio del año pasado en Washington. La última ronda previa había tenido lugar dos años antes.
Cuba espera alcanzar con Estados Unidos un nuevo acuerdo migratorio después del que ya suscribieron en 1994 a raíz de la llamada "crisis de los balseros". Miles de cubanos llegaron entonces a costas norteamericanas en un éxodo masivo de varios días.
Desde entonces, Washington se compromete a conceder cada año 20,000 visados a cubanos que quieran migrar. Con aproximadamente más de 1.5 millones de habitantes de origen cubano asentados sobre todo en Florida, Estados Unidos es el país donde vive la mayor comunidad del exilio de la isla.