La oficina del alguacil anunció que a algunos reos de la cárcel del condado se les reducirán las raciones de comida por dos semanas por haber destruido banderas estadounidenses en sus celdas.
Arpaio dijo que los presos las "desgarraron, escribieron sobre ellas, las pisaron, las arrojaron al inodoro, al basurero", según el comunicado.
"Lo que están destruyendo es propiedad del gobierno y tomaremos acciones contra aquellos que actúan de este modo", añadió.
Las banderas fueron colocadas en las celdas en noviembre, como parte de una iniciativa para fomentar el patriotismo que incluye la reproducción de música patriota a través de los altoparlantes de la prisión en la mañana y en la tarde.
La Corte Suprema de Estados Unidos falló varias veces que la profanación de la bandera es una forma de libre expresión protegida por la Constitución.
Arpaio, el "alguacil más duro de Estados Unidos", causó revuelo en los años pasados por su explícita oposición a los inmigrantes indocumentados y con frecuencia fue blanco de acusaciones por abuso de poder.