La ofensiva, por tierra y aire, tuvo lugar el 21 de junio en Doron Naira, una isla en el lago Chad, y en las áreas fronterizas de Nigeria, entre ellas Cross Kauwa y Baga, en el estado nororiental de Borno; principal enclave de este grupo terrorista.
En el lado militar, un soldado chadiano perdió la vida y otros 12 resultaron heridos, según el texto, en una operación que perseguía "interrumpir los suministros y la línea de comunicaciones de los terroristas de Boko Haram".
Por su parte el Estado Islámico, en otro comunicado emitido a través de su agencia de noticias Amaq y en el que parece aludir a estos mismos hechos, aseguró que "15 soldados de la coalición africana murieron y otros resultaron heridos", sin hacer ninguna referencia a víctimas mortales propias.
El grupo Estado Islámico en la Provincia de África Occidental (ISWAP), muy activo en esta zona, se formó en 2016 cuando una facción del grupo islamista nigeriano Boko Haram prometió lealtad al Estado Islámico.
Los constantes ataques de ambas facciones -contra efectivos militares y población civil- afectan tanto a las islas del lago Chad como a todos los países que lo bordean: Nigeria, Níger, Chad y Camerún; los mismos que lo combaten de forma conjunta.
Esta insurgencia islamista, que comenzó hace una década en el noreste de Nigeria, ya ha dejando más de 27,000 muertos y unos dos millones de desplazados, según cifras de la ONU.