Enviado de EE.UU. participará en la reunión en Moscú para la paz en Afganistán

El enviado especial de EE.UU. para la reconciliación afgana, Zalmay Khalilzad, participará este jueves en la conferencia de Moscú destinada a desatascar las negociaciones entre el Gobierno de Afganistán y los talibanes, y a la que también están invitados China y Pakistán.

Una de las portavoces del Departamento de Estado de EE.UU., Jalina Porter, confirmó que Khalilzad acudirá a la capital rusa y explicó que el diplomático recientemente viajó a Afganistán para reunirse con el presidente afgano, Ashraf Ghani, y el presidente del Consejo Superior para la Reconciliación Nacional, Abdullah Abdullah.

Abdullah, de hecho, encabezará la delegación del Ejecutivo afgano en la conferencia, donde el equipo de la formación insurgente estará liderado por el subjefe de Asuntos Políticos y jefe de la Oficina Política de los talibanes, el mulá Baradar Akhund.

La conferencia multinacional de Moscú está programada para el jueves 18 de marzo en la capital rusa, en un encuentro en el que participará Rusia y al que están invitados China y Pakistán.

Esta reunión forma parte de los esfuerzos internacionales, liderados por Washington, para acelerar las negociaciones de paz intraafganas en Catar, estancadas durante más de seis meses sin progresos significativos, entre el Gobierno de Afganistán y los talibanes.

La participación de Khalilzad en la conferencia envía la señal de que la Administración del presidente estadounidense, Joe Biden, está dispuesta a trabajar con Rusia para acabar con la violencia y establecer un Gobierno interino en Afganistán.

Este mes, Estados Unidos propuso una nueva hoja de ruta para acelerar el proceso de paz en Afganistán que incluye la sustitución del Ejecutivo de Ghani por otro interino que estaría formado por funcionarios designados por el propio Ghani y por los talibanes, al tiempo que ambas partes se comprometen a declarar un alto al fuego en todo el país.

Bajo ese plan, se celebrarían elecciones presidenciales y parlamentarias una vez que se adopte una nueva constitución.

Por su parte, EE.UU. debe decidir si cumple con su promesa y retira sus tropas de Afganistán el 1 de mayo, tal y como se comprometió con los talibanes en el histórico acuerdo que la Administración del presidente Donald Trump (2017-2021) firmó con los talibanes en febrero de 2020 en Doha.

A cambio, los insurgentes prometían garantizar que el territorio afgano no acogería a terroristas extranjeros ni serviría de base para cometer atentados contra otros países.

Sin embargo, actualmente, Afganistán vive una intensificación de la violencia y una ola de ataques selectivos contra civiles afganos en áreas urbanas.

La mayoría de las víctimas de estos ataques son civiles, incluidos activistas de derechos humanos, intelectuales y periodistas, en muchos casos mujeres.