Incertidumbre y miedo en Nigeria tras sangriento ataque terrorista

El número de muertos en el atentado del lunes contra una estación de autobuses en Abuya sigue sin estar claro, pero en cualquier caso se trata del peor que ha vivido la ciudad, cuyos habitantes luchaban hoy con el miedo ante la impotencia de las autoridades.

Etiquetas: 

Oficialmente, la cifra de víctimas mortales sigue siendo de 71, pero un recorrido por los hospitales cercanos eleva la cifra a más de 200, según los medios. El país está en estado de shock y el nivel de alerta en Abuya en "rojo".

El diario Punch contabilizó además al menos 257 heridos. El gobierno pidió a la población que done sangre para salvar vidas.

Según las declaraciones de testigos, los atacantes fueron cuatro hombres que iban en un coche pequeño. Fracasó su intento de abandonar el vehículo justo antes de la explosión y murieron en el acto. Sin embargo, esta versión no ha sido confirmada de manera oficial.

Un hombre relató al diario "Vanguard" que había llevado a su sobrino para que subiera a un autobús en dirección a Taraba, en el este de Nigeria. "Entonces oí el fuerte ruido de una explosión y corrí a la estación". En medio del llanto explicó que tardó mucho tiempo en encontrar a su sobrino, porque el cadáver estaba tan quemado que era irreconocible. "Lo pude identificar sólo gracias a su ropa".

Hoy seguía habiendo en el lugar numerosos objetos como ropa, zapatos y bolsos de los muertos, así como sangre y pequeños trozos de cadáveres.

El portavoz parlamentario Aminu Tambuwal calificó el ataque como "cobarde y bárbaro". Pese a la presencia de la policía, la población tiene miedo. "Tememos que haya otra bomba que cause aún más daño y que estemos aquí atrapados en un embotellamiento y no podamos avanzar", relató la nigeriana Madam Zara Ibrahim a dpa.

El gobierno cree que la responsable es la secta islámica extremista Boko Haram, a la que las autoridades llevan años combatiendo sin éxito. Se estima que la violencia de los últimos cinco años ha matado a más de 6.000 personas en el país del oeste de África.

Aunque el presidente del país, Goodluck Jonathan, subrayó que su gobierno hará todo por derrotar al grupo, desde hace tiempo parece impotente en su lucha contra los extremistas. Los críticos acusan al gobierno de no actuar lo suficiente para impedir los ataques.

"El atentado, cometido a pocos minutos en coche de los edificios gubernamentales, muestra que todas las medidas de seguridad tomadas hasta ahora no sirvieron", se lamentó Salahudeen Usman, que vive en el barrio de Garki. "En todas partes de Abuya hay controles militares, pero no han servido de nada". (DPA)