"No voy a hacer una afirmación así hasta que no haya una confirmación de los comandantes de las YPG (las Unidades de Protección Populares kurdas)", dijo Rahman a dpa.
Por parte de las YPG, que defienden la ciudad de Kobane, ubicada en el norte de Siria junto a la frontera con Turquía, no hubo ningún pronunciamiento.
Testigos en Kobane informaron durante la noche que numerosos residentes sufrieron problemas respiratorios, uno de los síntomas del uso de gas venenoso. Los médicos sobre el terreno no han podido verificar hasta el momento el uso de esas armas por parte del EI.
Según el Observatorio, los combatientes de EI volvieron a atacar con intensidad a los kurdos. Se registraron varias explosiones. En los enfrentamientos en el este de la ciudad murieron al menos 30 yihadistas y once combatientes de las YPG.
En los últimos días, los radicales de EI han recibido refuerzo de otras partes de Siria. (DPA)