El primer ministro, Nawaz Sharif, instó a las Fuerzas Armadas a enviar equipos médicos al desierto de Thar, en el provincia de Sindh.
Según medios locales, en la zona murieron de hambre 122 niños en los tres últimos meses. Los habitantes del lugar explicaron a la televisión que la mayoría eran miembros de la empobrecida minoría hindú.