El comandante de las Fuerzas Armadas de Colombia, general Freddy Padilla de León, dijo que el brigadier general Luis Mendieta, los coroneles Enrique Murillo y William Donato, y el suboficial Norbey Delgado están bajo protección de las fuerzas especiales del Ejército.
En entrevista con el diario local El Tiempo, el jefe militar indicó que en la madrugada de este lunes se iniciaban los operativos para traer a un hospital de Bogotá a los cuatro militares rescatados la víspera de un campamento guerrillero en las selvas del Guaviare.
“Esperamos tanto tiempo para realizar este sueño, que esperar unas horas más nos dará la certeza de que todo va a salir bien.
Ellos están bien, protegidos por la tropa, un soldado enfermero de combate los está atendiendo y los encontró estables”, dijo.
Padilla destacó “el trabajo profesional de inteligencia que hizo el Ejército y el compromiso de los soldados de las Fuerzas Especiales que llegaron hasta el sitio donde estaban los secuestrados”.
“La operación como tal tomó cuerpo el 12 de marzo, cuando las tropas capturaron herido a 'Marcos Parrilla', un guerrillero del frente primero. Él se desmovilizó y en medio de su arrepentimiento entregó información del lugar por donde movían a los secuestrados”, dijo.
Agregó que “sobre esa información se reforzó el trabajo de inteligencia y después de analizar cuidadosamente cada detalle decidimos que el día era el 13 de junio”.
Explicó que el lugar de la operación “es una zona selvática tupida, de difícil acceso sobre el caño Tigre. El grupo de las FARC que estaba custodiando a los secuestrados abrió fuego y los combates han persistido durante todo el día, pero tenemos un control de la zona”.
Padilla apuntó que “las condiciones no han permitido en muchas ocasiones que las cosas se den, pero el pueblo colombiano puede estar seguro de que ni un solo día hemos dejado a un lado el empeño de traer a casa a todos los secuestrados”.
Indicó que el objetivo principal de las Fuerzas Armadas colombianas es rescatar sanos y salvos a los 18 rehenes que aún permanecen en poder de las FARC, tras la liberación el domingo de los cuatro militares.
“No los hemos olvidado y entre nuestros objetivos principales está traerlos al seno de su hogar y sus instituciones”, señaló.