El embajador ruso ante Naciones Unidas, Vasili Nebenzia, recalcó que el objetivo de esta "operación especial" es "proteger a las personas que desde hace ocho años llevan sufriendo un genocidio por parte del régimen de Kiev" y "desmilitarizar" Ucrania.
Nebenzia habló durante una reunión de urgencia del Consejo de Seguridad que se celebró mientras en Moscú el presidente ruso, Vladímir Putin, anunciaba el inicio de la intervención militar.
El diplomático, que trasladó al resto de países parte del discurso de Putin, destacó que "la ocupación de ucrania no está en los planes" de Rusia y aseguró que la intervención tiene justificación en la Carta de Naciones Unidas, a pesar de que el propio secretario general de la organización, António Guterres, dijo hoy lo contrario.
En su discurso, Nebenzia responsabilizó repetidamente al Gobierno ucraniano de la situación, acusándole de incrementar sus "provocaciones" en el este del país, donde Moscú ha reconocido la autoproclamada independencia de dos repúblicas separatistas.
Según dijo, para Rusia lo fundamental es proteger a la población de esas áreas, mientras que acusó a Estados Unidos y a los países europeos de ignorar su situación y sólo guiarse por intereses geoestratégicos.