Scholz, ante el dilema de la paridad para el inédito tripartito alemán

El socialdemócrata Olaf Scholz entra mañana en la recta final hasta su investidura como canciller, el próximo miércoles, con la prevista ratificación de su pacto de coalición por parte de su partido y de sus futuros socios, verdes y liberales, y la incógnita de quién asumirá la cartera de Sanidad.

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Al Partido Socialdemócrata (SPD) le corresponde el primer turno para dar el visto bueno al acuerdo negociado en su ronda final entre Scholz, los copresidentes verdes -Robert Habeck y Annalena Baerbock- y el líder del Partido Liberal (FDP), Christian Lindner, junto a su secretario general, Volker Wissing.

Lo hará en un congreso con voto telemático este sábado. Le seguirá el domingo el FDP en un formato similar, tras lo cual el lunes los Verdes comunicarán el resultado de la consulta entre sus 125,000 militantes.

La ratificación de los tres socios aún virtuales, una constelación inédita a escala de un gobierno federal alemán, es el penúltimo capítulo hasta el relevo en el poder. Éste se materializará con la sesión de investidura, prevista para el miércoles, en el Bundestag (Parlamento), donde el tripartito suma 416 del total de 736 escaños.

"El miércoles terminará la etapa en la Cancillería de Angela Merkel. A partir de ahí, como ha anunciado reiteradamente, se retirará de la actividad política", respondió hoy el portavoz del Gobierno, Steffen Seibert, a la pregunta sobre los planes futuros o posible agenda pública de la líder.

Ese día habrá cumplido 5,860 días en el cargo -diez menos que el patriarca conservador Helmut Kohl, récord de permanencia en el poder en la Alemania actual-. Seibert, con once años cumplidos como portavoz, no reveló tampoco cuáles son sus propios planes tras el fin, ya inminente, de la "era Merkel".

SANIDAD, LA ÚLTIMA INCÓGNITA

El reparto de carteras se conoce: seis para el SPD, cinco para los Verdes -entre ellos el superministerio de Economía y Clima, para Habeck, además del de Asuntos Exteriores, para Baerbock-, y cuatro para el FDP -encabezados por Finanzas, para Lindner, defensor del techo de deuda.

Los liberales nunca favorecieron la cuota femenina: están en la franja baja en cuanto a representación de mujeres en el Bundestag, con un 23.9 % de escaños ocupados por diputadas; el furgón de cola lo ocupa la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD), con un 13 % de parlamentarias.

En la asignación de sus carteras tampoco buscaron la paridad, sino que tres de sus cuatro ministerios estarán ocupados por hombres -Finanzas, Justicia y Transportes-.

Los Verdes, partido con la máxima cuota de escaños femeninos, un 59 %, compensó algo ese desequilibrio al asignar tres de sus cinco carteras a mujeres -Exteriores, Medioambiente y el Ministerio de la Mujer, Familia y Juventud.

Pero ni así evitan a Scholz el probablemente mayor dilema ante la formación de su equipo. Su puesto como jefe de gobierno obviamente no está en discusión. Tampoco hay dudas respecto al de ministro adscrito a la Cancillería, un cargo adicional a los seis que les corresponden, que será para Wolfgang Schmidt, persona de confianza desde que era alcalde-gobernador de Hamburgo, antes de convertirse en vicecanciller de Merkel.

Se da por hecho, asimismo, que seguirá al frente de Trabajo y Asuntos Sociales Hubertus Heil, puntal de los logros de sello socialdemócrata en la pasada legislatura y también del objetivo de subir el salario mínimo interprofesional de sus 9.5 euros actuales a 12, incluido en el pacto de coalición.

A Scholz no le queda margen si aspira a la paridad en lo que respecta a Sanidad. Para muchos compatriotas, la persona ideal es Karl Lauterbach, experto en la materia y omnipresente en los medios desde que estalló la pandemia.

Cada uno de sus pronósticos, advertencias y recomendaciones sobre las pautas a seguir se ha cumplido. Defiende la máxima cautela, en línea con lo que ha sido la gestión de Merkel, quien deja el puesto sin haber podido atajar la última de las grandes crisis de sus 16 años como canciller.

Los Verdes y los liberales asignaron sus ministerios tras presentar su pacto de coalición. Scholz, quien asignó ya la jefatura del equipo de crisis contra la covid al general mayor Carsten Breuer, se guarda su lista y no la dará a conocer, según ha asegurado, hasta la semana próxima.