Con este preámbulo se dieron cita las fechas esperadas de los encontronazos más importantes del 2020 en Estados Unidos y vimos caer a los 49ers de San Francisco frente a los Chiefs de Kansas City, en un partido que emocionó con sus ganadores que obtuvieron el trofeo tras 50 años y que deja ver que el sueño del deporte que es y seguirá siendo punta de lanza de grandes figuras capaz de vender jerseys y tenis en todo el mundo a un precio de oro. Pero que importa si me hace feliz ponerme el jersey de mi equipo cuando sale a dar el alma en la cancha.
Así, el lunes con la llamada resaca futbolera que dejó también una especie de San Lunes llegó el duelo en Iowa para encontrar al jugador idóneo en las elecciones presidenciales, en un ambiente reñido que días anteriores daban ya la victoria a Bernie Sanders pese a las apuestas adelantadas por Biden, sin embargo la tecnología logró adelantarse para jugarles una mala pasada y al mero estilo mexicano la tecnología falló y arruino el regocijo de los demócratas en el inicio de la elección del candidato que le disputará la Casa Blanca a Donald Trump en noviembre.
Bernie Sanders y Pete Buttigieg, anunciaban el lunes estar a la cabeza, al tiempo que los republicanos en Iowa ponían también a Donald Trump sin elección con un 97 por ciento de aprobación.
Este martes el escrutinio de los demócratas sin mucho ruido confirma el declive de Biden y pone a Sanders y Buttigieg (que poco había figurado ) al frente de la elección.
El Partido Demócrata de ese estado informó del 62 % de las circunscripciones escrutadas. Buttigieg acumula el 27 % de los votos, seguido de Sanders, con el 25 %; la senadora Elizabeth Warren, con el 18.3 %, y el exvicepresidente Joe Biden, con el 15.6 %. En este proceso deja el trago amargo a Biden y aquienes quizá veían venir de nuevo la política de Obama.