Señaló, además, que como institución el SAT está obligado a tener mucha apertura durante sus actuaciones, a cuidar los recursos y las formalidades legales, y también a rendir cuentas a la ciudadanía de lo que hace.
En este sentido, insistió en que el SAT apuesta por la vigilancia electrónica del comportamiento de los contribuyentes antes que por la realización de actos de auditoría, para lo cual el uso de tecnologías de vanguardia es fundamental.
"La tecnología nos permite de manera sigilosa y silenciosa vigilar el comportamiento de los contribuyentes sin necesidad de hacer una auditoría, para realizarla solo en aquellos casos en los que se observa una inconsistencia o alguna irregularidad", precisó.
Mientras tanto, Jesús Alvarado Nieto, Presidente de ANEFAC, comentó que este congreso es un espacio de diálogo, para aclarar lo que espera el SAT de los contribuyentes, más allá del pago de impuestos, y cómo ellos pueden ayudar a mejorar los procesos de fiscalización.