La otra cara del viento, como se titula en español, comenzó a filmarse en 1969 y, luego de varias interrupciones, su postproducción se inició en 1972, pero nunca concluyó.
El filme, la última obra de Welles (1915-1985), cuenta la historia de un veterano director de cine que, tras un período en Europa, regresa a Hollywood para demostrar el valor de su trabajo.
Según el productor Filip Jan Rymsza, quien desde 2015 impulsa una campaña para financiar la continuación de la película, Netflix compró los derechos sobre los mil 83 rollos del realizador y asumirá la restauración y culminación de la obra.
Por su parte, el jefe de contenidos de Netflix, Ted Sarandos, aseguró que 'se trata de un sueño hecho realidad y la posibilidad de homenajear a uno de los directores más sobresalientes de la historia del cine'.
Cinéfilos y entusiastas de todo el mundo podrán experimentar la magia de Orson Welles una vez más o por primera vez, señaló.
Rymsza trabajará con Frank Marshall y Peter Bogdanovich, quienes participaron en el proyecto original.