La profesora universitaria Susan Antebi, originaria de Cambridge, Massachusetts, quien ya votó por Hillary Clinton, aseguró que Donald Trump “no va a ganar” y que es “inquietante la amenaza” que representa su discurso de supremacía blanca.
Dijo sentirse más atraída por la plataforma de Bernie Sanders, pero que votó por Clinton porque “es importante que no gane Trump. Estoy registrada en un condado conservador en California y ahí el republicano podría tener más posibilidades”.
La doctora en Lengua y Literatura romántica indicó que la campaña del magnate inmobiliario “da vergüenza” porque ha sido “muy baja y sucia, se ha convertido en un espectáculo”.
Por su parte, para el músico estadunidense, Richard Fouchaux, quien creció en Pennsylvania y New Jersey, pero ha vivido en Canadá desde los 15 años, el candidato republicano representa el “ugly American” (el americano feo).
“Recuerdo que cuando era joven en un aeropuerto de Europa había un americano imprudente que exigía que alguien le hablara en inglés. Trump me recuerda a esa persona fea”.
Como algo “muy decepcionante”, catalogó la actual campaña electoral de su país: “Si Trump gana me sentiría peor que cuando Rob Ford ganó la alcaldía de Toronto, me sentiría muy avergonzado del pueblo americano”.
Agregó que “ni siquiera el mismo Trump cree la mitad de lo que dice”.
Desde Canadá ha votado en algunas elecciones estadunidenses y a tres semanas de los comicios más esperados en todo el mundo, Richard Fouchaux se dijo indeciso respecto a por quien votar.
Aclaró que su indecisión no es entre el republicano y la demócrata sino entre ésta y el candidato del Partido Verde en su circunscripción de New Jersey.
El maestro de música y defensor de derechos humanos, mostró sus reservas respecto a la gente que rodea a Clinton y su preferencia por el Partido Verde, aunque quien más le gustaba era Sanders.
Para Susan Antebi, quien ha votado Demócrata “por falta de opciones”, las acusaciones de acoso sexual contra Trump son preocupantes, pero son más bien una distracción de otros temas como la posición militar de Estados Unidos en las guerras en Medio Oriente.
“Es espantoso y penoso como ha llevado Trump la campaña. Si gana va a ser mucho peor, pero siento que no va a ganar. Lo malo es que si pierde ahora qué pasara en cuatro años, ¿volverá con más fuerza?”, se preguntó la directora del programa de Estudios Latinoamericanos en la Universidad de Toronto.
Alertó que Trump ha provocado el resurgimiento del conservadurismo estadunidense, que “podría anclarse y dominar”.
Antebi, quien llegó en 2009 por un ofrecimiento laboral en la Universidad de Toronto, dijo que dejó su país con Barack Obama como presidente y llegó a Canadá bajo el gobierno conservador de Harper y luego le tocó el escandaloso gobernador de Toronto, Rob Ford, conocido por su adicción a las drogas.
“Cuando llegué a Canadá me topé con Harper y Ford, fue un shock encontrarme con esa situación política en este país, pero ahora las cosas han cambiado. Quizá me quede a vivir aquí”, señaló la estadunidense, casada con un mexicano-americano y madre de un niño canadiense-americano.
Fouchaux, quien ha pasado la mayor parte de su vida en tierras canadienses, manifestó su deseo de adquirir la nacionalidad canadiense.