En el conocimiento de que el siguiente gobierno evitará la compra de vehículos por flotilla, como lo ha anunciado, el director general adjunto de la AMDA, Guillermo Rosales, pidió hacer una evaluación de los vehículos flotilla que requieren su reposición.
“Imagino que el sector salud no pueda brindar servicios porque las ambulancias están descompuestas, ya en el primer semáforo, una vez que salieron de la base. Sería algo totalmente reprobable y que no hablaría bien de una política de austeridad y que no podría sustentarse”, argumentó.
Refirió además que en caso de una catástrofe, empresas como la Comisión Federal de Electricidad (CFE) necesitan una gran capacidad de movilización, como lo han demostrado, y ello gracias a las unidades con las que cuentan. “Imaginen que eso no se pueda hacer porque los camiones están parados en el taller. Esto sería inaceptable”.
El director general adjunto de la AMDA refirió que según los indicadores la venta de flotillas ha disminuido como porcentaje total de las ventas de vehículos, y de un 20 por ciento registrado en 2016, en agosto pasado representó 13 por ciento.
Este indicador incluye compras de gobierno y corporativas, es decir, que ha disminuido la participación de este componente respecto al total del mercado.
“Consideramos que en la comparativa de 2019 contra 2018 habrá un efecto menor en las anunciadas disposiciones del próximo gobierno federal y el Congreso, dado que en 2018 las compras gubernamentales son muy menores”, señaló.