Antes que se disputará la primera fecha del certamen, su técnico, el chileno Carlos Reinoso, señaló que de los primeros nueve puntos, la meta era conseguir siete, y así lo logró, al salir victorioso en las primeras dos jornadas, frente a Santos Laguna y Puebla, y empatar con Cruz Azul.
Tras tres empates consecutivos ante Monterrey, Querétaro y Guadalajara, parecía que el equipo perdía un poco de aire, sin embargo, sumaron tres triunfos en fila, con siete goles a favor y ninguno en contra.
Fue en la jornada 10 cuando los Tiburones Rojos perdieron la categoría de invicto, en la visita que hicieron a Tijuana, el último equipo de la Liga MX que ostentaba esa etiqueta.
Además de los buenos resultados, se debe destacar el poder de convencimiento que ha tenido Reinoso con sus jugadores, para llevar a cabo su idea futbolística y la elección de los refuerzos.
Jugadores como los argentinos Gabriel Peñalba y Julio Furch han respondido con creces a la confianza que pusieron en ellos y se han convertido en elementos fundamentales en el accionar del conjunto.
Asimismo, otros que ya estaban, como el también argentino Daniel Villalba y mexicanos como Jesús Paganoni, Edgar Andrade y Leobardo López, han tomado un segundo aire, cuando parecía que ya no podían ofrecer más al futbol.
Con la permanencia casi asegurada en la primera división, el siguiente objetivo es la calificación a la liguilla y el equipo está cerca de hacerlo, con 22 unidades que lo colocan en el segundo sitio de la clasificación.