Bundesbank advierte de un posible rebrote de la crisis del euro

El presidente del Bundesbank alemán, Jens Weidmann, advirtió de un posible rebrote de la crisis del euro si los países de la moneda única abandonan la política de reformas, durante una entrevista publicada hoy en el diario alemán "Bild".

"El euro está en la fase de rehabilitación", afirmó Weidmann al rotativo más vendido de Alemania. "En esa fase se necesita perseverancia y una voluntad fuerte, de lo contrario existe el peligro de volver a recaer", agregó.

"Es cierto que por el momento los mercados financieros se han tranquilizado. Sin embargo, puede ser una seguridad engañosa", indicó. "La crisis puede volver a recrudecerse. Cada uno debe ser consciente de su responsabilidad para contar con una base estable en su propio país y en la zona del euro", afirmó.

Asimismo, el presidente del Bundesbank rechazó conceder una nueva quita de la deuda a Grecia. "Un recorte de la deuda no es ninguna solución para los problemas fundamentales del país".

Para Weidmann es importante que Grecia continúe con su duro programa de reformas y lo lleve hasta el final. "El país debe corregir sus problemas de competitividad, ser más productivo y consolidar sus presupuestos estatales", declaró. "La ayuda externa sólo sirve para comprar tiempo, pero no sustituye las reformas imprescindibles en el país", agregó.

Respecto a la política de tasas bajas del Banco Central Europeo (BCE), el presidente del Bundesbank volvió a alertar de los peligros de continuar con ella: "Ésta puede retrasar las reformas necesarias, mantener con vida de manera artificial a los bancos en quiebra y provocar una nueva burbuja de especulaciones".

Sin embargo, Weidmann también reconoció que la "eurozona se recupera paulatinamente de la peor crisis económica desde la posguerra" y que los riesgos inflacionistas son "escasos". "Esto justifica los bajos tipos de interés", agregó.

"No obstante, la baja presión inflacionista no es una carta blanca para relajar a voluntad la política monetaria", indicó.

El BCE decidió rebajar los tipos de interés en noviembre hasta un nuevo récord de 0.25 por ciento para reactivar la economía en Europa.